Egipto,El Cairo.--"Es la primera vez en muchos años que nieva en los suburbios de El Cairo", ha asegurado este viernes Ali Abdelazim, responsable del centro meteorológico de la capital egipcia. Según los registros, la última vez que nevó en la zona fue hace 112 años, el 10 de enero de 1855, cuando se registró una temperatura máxima de 6 grados centígrados.

"El jardín entero es blanco. Es la primera vez en mi vida que veo esto", ha dicho a la agencia AFP Karim Kheirat, un vecino de la ciudad de Medinati, al norte de la capital.

El calor, el desierto y el clima seco amanecieron alterados como consecuencia de la ola de frío que afecta a Egipto, un fenómeno meteorológico que también ha llegado a otras ciudad de Oriente Medio como Jerusalén (Israel) o Mafraq (Jordania).

A Jerusalén el frío polar llegó el miércoles con fuertes vientos. Las clases en colegios y universidades se han suspendido este viernes por segundo día consecutivo, y el transporte y todas las actividades gubernamentales están paralizados.

La Dirección de Aviación Civil ha notificado el cierre de las rutas aéreas y del único aeropuerto internacional de Israel hasta nuevo aviso.

EL CAIRO, EGIPTO 05-Sept-2013.- Las autoridades egipcias advirtieron hoy de que se enfrentará con "mano de hierro" el terrorismo para evitar que regrese la época de atentados de los 90, tras la explosión contra el convoy del ministro del Interior, Mohamed Ibrahim.

"Este suceso no apartará al Gobierno de su lucha contra el terrorismo con toda firmeza y fuerza", señaló en un comunicado el Consejo de Ministros.

El Ejecutivo afirmó también que actuará con "mano de hierro contra toda mano que juegue con la seguridad nacional, hasta que retorne la estabilidad a Egipto".

Por su parte, la Presidencia aseguró en una nota que "no permitirá que el terrorismo, derrotado por el pueblo egipcio en las décadas de los ochenta y noventa, vuelva nuevamente a mostrar su feo rostro".

"El Estado se compromete ante su pueblo a que los que perpetran actos terroristas, sea cual sea su tendencia (política), no escaparán de la espada de la ley y del puño de la justicia".

Las autoridades condenaron "la agresión terrorista" contra Ibrahim, que ha salido ileso del ataque, aunque la explosión ha dejado al menos 24 heridos y una enorme destrucción en el barrio de Ciudad Naser.

El primer ministro egipcio, Hazem el Beblaui, sigue la evolución del suceso y los esfuerzos para capturar a los culpables, y se ha informado del estado de los heridos civiles y policías.

El grupo radical Gamaa Islamiya, responsable de numerosos atentados terroristas en la década de 1990 hasta que renunció a la violencia en 2003, se desvinculó del ataque y advirtió de que "estas explosiones abrirán la puerta a un conflicto sangriento".

La coalición islamista, que incluye a los Hermanos Musulmanes y apoya al depuesto presidente Mohamed Mursi, también condenó el atentado y subrayó el pacifismo de sus acciones.

El balance de víctimas por los enfrentamientos que se han desatado a última hora del martes entre simpatizantes del presidente egipcio, Mohamed Mursi, y las fuerzas de seguridad en la Universidad de El Cairo ha ascendido a 16 muertos y 200 heridos, según el Ministerio de Salud.

N365 / EP / Fotos cortesía de AFP, EFE

Al menos 18 personas han muerto en las últimas horas en enfrentamientos entre islamistas y opositores en la sede central de los Hermanos Musulmanes en El Cairo, lo que elevando el número de fallecidos desde anoche en todo el país, informaron a Efe fuentes médicas.

Con la muerte de una persona que había resultado herida grave, el balance provisional de víctimas mortales en la refriega frente al edificio de la Hermandad, en el barrio de Muqatam, en la periferia cairota, alcanza ya los nueve.

Otras cinco personas perdieron la vida en enfrentamientos similares frente a las oficinas del gubernamental Partido Libertad y Justicia (brazo político de la Hermandad) en la ciudad meridional de Asiut.

Las fuentes agregaron que en total 716 personas han resultado heridas en las protestas, que durante la jornada de ayer tuvieron un marcado carácter pacífico hasta caer la noche.

El ataque sobre la sede de la Hermandad -a la que pertenecía el presidente egipcio, Mohamed Mursi, hasta que asumió el cargo- comenzó anoche con el lanzamiento de cócteles molotov y piedras por parte de los manifestantes, mientras que miembros de la agrupación disparaban desde dentro del edificio contra los agresores.

Entre los heridos, hay al menos un oficial de la policía egipcia, que fue alcanzado por disparos de balines.

Tras hacerse esta madrugada con el control del edificio, ubicado en el barrio de Muqatam, en la periferia de El Cairo, los manifestantes han quemado todas las plantas del la sede y han causado graves daños materiales.

Las oficinas han sido saqueadas y los asaltantes se han llevado de ellas equipos electrónicos, mobiliario como sillas y mesas, y documentos del grupo.

En declaraciones a la agencia oficial Mena, un portavoz de la cofradía acusó a los agresores de haber hecho explotar al menos dos bombonas de gas en la entrada del edificio y de haber disparado contra la sede, lo que causó heridos.

Además, señaló que el ataque se produjo “en ausencia total de los cuerpos de seguridad”.

Cientos de personas continúan hoy manifestándose contra Mursi tras haber pernoctado en tiendas de campaña en la cairota plaza Tahrir y junto al palacio presidencial de Itihadiya, mientras la oposición ha dado de plazo hasta mañana, martes, al mandatario para que dimita.

Nuevas protestas están previstas para hoy a partir de las 16.00 hora local (14.00 GMT). EFE