Y sigue la ola de frío ártico hace temblar a los estadounidenses del Norte al Sur
Una nueva corriente de frío ártico ha tendido un manto de nieve y vientos helados por la mayor parte de Estados Unidos, con récords de temperaturas bajas que afectan desde el norte del país hasta los estados sureños de Florida y Tennessee.
En las últimas horas se ha dado cuenta de la muerte de casi una decena de personas debido a las malas condiciones climatológicas, especialmente en estados sureños, muy castigados por la crisis y donde las viviendas no están acondicionadas para el frío.
En Tennessee se han registrado al menos cuatro muertes relacionadas con el frío, incluidas la de una mujer de 81 años que salió a la calle el domingo por la noche, y un enfermo de Alzheimer que murió tras permanecer varias horas desorientado en el patio de su casa en Nashville.
En Carolina del Sur, también fue encontrado muerto un hombre que buscó refugio bajo una tienda de campaña, detrás de una gasolinera, y en Misisipi un hombre de 68 años murió también de frío en su casa, donde se había estropeado la calefacción.
En el norte del país, una mujer de 88 años falleció de hipotermia el martes en su casa de Chicago (Illinois), donde no había calefacción.
Además, otra persona que se vio envuelta en un accidente múltiple de coches falleció en Kansas al despeñarse tras intentar esquivar los vehículos que patinaban en el hielo. En las cadenas montañosas conocidas como las Dakotas, tanto en la del Norte como en la del Sur, las temperaturas han alcanzado las inusuales cifras de 45 grados celsius bajo cero lo que, unido a las grandes nevadas registradas, ha paralizado completamente esta zona del territorio estadounidense muy próxima a Canadá.
Esta zona del país aún batalla con los más de 75 centímetros de nieve que cayeron a finales del mes pasado y que, una vez retirada de carreteras y caminos, se ha congelado formando grandes montañas blancas con la consistencia de una roca.
Sin embargo, tendrán que enfrentarse a otros 25 centímetros de nieve más que, según las previsiones, van a caer en las próximas horas. Los meteorólogos aseguran que las temperaturas que están registrando las dos Dakotas han roto los anteriores récords, marcados en 1979.
Los mismo ocurre con los 38 grados bajo cero que están sufriendo los habitantes del estado de Minesota, conocido como "el congelador de Estados Unidos". Son las temperaturas más bajas en ese estado desde que se tiene registro, en 1974.
La nieve y el frío polar se han convertido también en un problema en la región del noroeste de Estados Unidos conocida como Nueva Inglaterra, que incluye a estados como Maine, Vermont, Nuevo Hampshire o Massachusetts.
En la localidad de Burlington, en Vermont, han caído en los últimos días 80 centímetros de nieve, la mayor cantidad en los 80 años de los que existen registros. La oleada de viento ártico ha alcanzado también al sur del país, como el soleado Florida, donde las autoridades han declarado el estado de emergencia y lanzado mensajes de alerta para prevenir a los agricultores de posibles pérdidas de sus cosechas, especialmente de cítricos y vegetales.
Este miércoles el gobernador de Florida, Charlie Crist emitió una orden para permitir que los agricultores puedan cargar camiones por encima del límite establecido para salvar las cosechas.
En Orlando, sede de varios parques temáticos, se han registrado temperaturas máximas de 8 grados, todo un récord para este importante destino turístico de Florida. El Servicio Nacional de Meteorología ha centrado su atención también en los estados sureños de Luisiana y Georgia, ante la mezcla peligrosa de frío y nieve que se espera para las próximas horas.
Tennessee está registrando hoy temperaturas cercanas a los ocho grados bajo cero, aunque la sensación térmica es de 17 grados bajo cero debido a los vientos. En Memphis, la mayor ciudad de Tennessee, los vientos pueden alcanzar los 50 kilómetros por hora, con una probabilidad de nevadas del 70 por ciento.
Algunos canales de televisión han desplazado reporteros a esta ciudad, muy castigada por la crisis económica y donde la falta de recursos y de acondicionamiento de las casas puede elevar las pérdidas materiales y personales registradas hasta el momento.
Con todos estos ingredientes, las noticias del tiempo acapararon hoy muchas horas de televisión en Estados Unidos donde, al menos por un rato, la renovada amenaza terrorista quedó relegada a un segundo plano.