Cuando la calidad se impone!.......ellos marcan la diferencia
Por Bolívar Balcacer.-Desde hace unos días, vengo pasando revista en mi memoria, de cuan buenos y profesionales son los comunicadores dominicanos que radicamos en la gran manzana, si bien es cierto que una parte de ellos se han quedado atrasados y en un limbo educativo en pleno siglo XXI era de la cibernética, no menos cierto es que una gran parte de ellos, han tomado la comunicación como un sacerdocio y han decidido prepararse para no quedar en el camino como algunos que se le va el tiempo en "dislalias y figureos".
Hoy pasando revista, he marcado los que entiendo están en la ruta del crecimiento y mirando más allá del horizonte, con un compromiso serio de informar sin inventar, de dar lo máximo, se que algunos se quejarán porque no aparecen en esta crónica pero lo interesante es que cada quien se auto analice y piense si realmente está en condición de colocar su nombre en el pedestal de los que marcan la diferencia.
Tomando como marco de referencia a Ignacio Ramonet y a otros colegas internacionales, nos adentramos en lo más profundo del comunicador dominicano local en la gran manzana, aquí abarcamos radio, periódico, televisión e internet, este es el análisis.
Un periodista, ¿qué es?
¿Qué es un periodista? Si analizamos la palabra, un periodista ("journaliste") es un "analista del día". Sólo dispone de un día para analizar lo que ha pasado. Se puede decir que un periodista es rápido, si consigue analizar, en un día, lo que pasa. Pero actualmente todo se produce en directo y en tiempo real; es enseguida, tanto en la televisión como en la radio. La instantaneidad se ha convertido en el ritmo normal de la información. Un periodista ya no debería llamarse periodista hoy en día. Debería llamarse instantaneísta. Pero todavía no sabemos analizar al instante. Por tanto, no hay análisis, ya que no hay distancia. Al final, el periodista tiene cada vez mayor tendencia a convertirse en un simple vehículo. Es el canal que enlaza el suceso y su difusión. No tiene tiempo de filtrar, ni de comparar, porque si pierde mucho tiempo haciéndolo sus colegas le ganarían la partida. Y, por supuesto, alguien se lo reprocharía.
El Rol de comunicador
La comunicación no se reduce a la mera intención de enviar un mensaje a un destinatario o destinatarios determinados con el propósito de cumplir una meta u objetivo. Implica una serie de factores que se ponen en juego en cada acto comunicativo y genera un alcance que va más allá de lo aparente, de lo explícito.
Al comunicar estamos dando a conocer nuestra forma de pensar, la perspectiva desde la cual observamos y concebimos al mundo. Incluso transmitimos valores, pensamientos, conceptos y hasta prejuicios en nuestros mensajes.
Comunicamos desde el lugar que ocupamos en el espacio social y no podemos prescindir de ello. No sólo lo hacemos mediante la palabra escrita u oral, sino a través de imágenes, símbolos, posturas, tonos e inflexiones de voz, sonidos, formas de comportarnos individual y socialmente, de vestirnos, etc.
Comunicamos cultura, porque además de estar inmersos en ella, ella misma es una de las partes constitutivas de nuestro ser. Sin embargo, es necesario discernir y separar entre la comunicación que producimos como actores sociales, que usamos constantemente en nuestra vida diaria, de la comunicación que se transmite a través de los medios masivos de difusión, los tradicionales (radio, tv, gráfica) y los más innnovadores (Internet e innumerables posibilidades que ofrece la Web 2.0) o la que llega a varias personas al mismo tiempo, pero en ámbitos más reducidos, como empresas de distinto tipo, instituciones educativas, religiosas, culturales, sociales, etc.
El significado de signos, símbolos e iconos que forman parte de la semiosis social es sumamente rico, complejo y heterogéneo. Muchas veces decimos cosas sin darnos cuenta, inconscientemente, incluso cuando queremos ocultar nuestras verdaderas intenciones.
Por eso, en un mundo plurisemántico, donde se dice demasiado, muchas veces sin medir las consecuencias y sin cuidar el contenido y la calidad de los mensajes, el rol de los comunicadores sociales adquiere cada vez más preponderancia.
Es el experto en comunicación quien puede dilucidar todos los niveles comunicativos y aprovechar al máximo las potencialidades de los mensajes dirigidos a las grandes masas, los soportes y los medios a través de los cuales estos son transmitidos.
Al comunicar formamos opinión, transmitimos ideas y pensamientos que influyen de alguna manera en quienes receptan el mensaje. Razón por la cual debemos ser cuidadosos, puesto que nuestra función no sólo requiere que seamos efectivos, claros y que cumplamos con los objetivos que se nos piden, sino que además debemos estimular la formación del espíritu crítico, brindando conocimiento e información con un plus distintivo, que puede estar ligado a la creatividad, e innovación, pero también a la ética y a la responsabilidad.
En pocas palabras comunicar es un arte. Y si bien el contexto y los medios condicionarán con frecuencia el contenido, forma y estilo de nuestros mensajes, como comunicadores no debemos olvidar el espíritu genuino que impulsa el oficio, ni la esencia a partir de la cual producimos los discursos de la más variada naturaleza.
El malabarista enganchado
Un buen comunicador no es el que roba cuartillas y se atribuye su autoria o el que inventa notas sin sentido para convertirlas en "musarañas informativas" o que edita un "libelo" amparado en internet y se cree el amo del tabloide local, un buen comunicador es el que dedica tiempo y espacio a explorar la información para emitirla, con la salvedad de la seriedad que la carrera implica.
No se puede jugar al aprendiz de periodista o de relacionista publico hasta de lucifer, (El Angel Caido) porque los tiempos ya han cambiado y no puede emitirse el periodismo por unas cuantas monedas, sin importar las consecuencias, porque eso es lo que hace al comunicador una prostituta de la palabra o escritura por paga, en nombre de la comunicación, aunque recuerdo mi articulo anterior en el sentido de que no se dejen sorprender de falsos relacionistas publicos que en nombre de la amistad y de la instantaneidad del internet nos venden como "pollos sin pluma" mientras ellos se ufanan en decir que trabajan por su plata sin importarle lo que hacemos o invertimos sino llenar sus bolsillos sin ton ni son ...Que les parece?
Entrevista al escriptor y prolifico periodista Josep Pla realizada el 8 de diciembre de 1976 por el periodista Joaquin Soler Serrano.