EU sólo deportará a los indocumentados con delitos[video]
El gobierno de Estados Unidos suspenderá momentáneamente la deportación de migrantes indocumentados sin historial delictivo, como parte de una serie de cambios en sus políticas migratorias y de seguridad.
El Departamento de Seguridad Interior (DHS, por sus siglas en inglés) anunció este jueves que se concentrará en ubicar y deportar únicamente a los indocumentados que tengan antecedentes penales, de acuerdo con un mensaje publicado en la página de la Casa Blanca.
La modificación en los criterios de deportación tiene el objeto de optimizar los recursos del DHS, de forma que ese dinero se destine y enfoque a resguardar la seguridad nacional, se explica en el texto.
“(El DHS) está fortaleciendo su capacidad para ubicar criminales, asegurándose de que no dedicará recursos a la deportación de personas que son de baja prioridad para ser deportadas”, indica el mensaje.
Algunas de las personas que forman el grupo considerado de “baja prioridad” dentro de los nuevos criterios de deportación —y que se verán beneficiados por el cambio— son los niños, exmilitares y los cónyuges de migrantes enlistados en las Fuerzas Armadas.
“No tiene sentido gastar nuestros recursos en estos casos de baja prioridad cuando podrían ser utilizados con mayor impacto en otros, incluyendo individuos que han sido sentenciados por crímenes serios”, dice el texto, firmado por la directora de Asuntos Intergubernamentales de la Casa Blanca, Cecilia Muñoz.
En colaboración con el Departamento de Justicia, el DHS buscará aplicar “criterios de sentido común” para definir, por ejemplo, cuáles son los lazos y la contribución de una persona a su comunidad o evaluar su historial militar.
“Al final, esto significa más presión de las leyes migratorias donde más se necesita, y menos donde no —esa es la forma más inteligente de aplicar las normas, mientras intentamos trabajar con el Congreso para cambiarlas”, señala el texto.
El gobierno del presidente Barack Obama, militante del Partido Demócrata, recientemente retomó sus llamados al Partido Republicano para concretar una reforma migratoria que abra un camino a la ciudadanía a unos 12 millones de indocumentados. Los republicanos, sin embargo, se oponen a tal iniciativa.
De momento, el cambio en la política de deportación fue bien recibido por algunos sectores.
El senador Robert Menéndez, miembro del grupo de legisladores hispanos en el Congreso, aplaudió la modificación, que describió en un comunicado como “un importante paso en la decisión correcta”.
Menéndez exhortó al DHS a crear medidas adicionales que ayuden a las familias residentes en Estados Unidos a evitar verse afectadas por la deportación y permanecer juntas.