Pensamientos originales apropiado por personas
Por:Manuel Moreno.-Quienes nos dedicamos al periodismo, a la comunicación online, vemos cómo en muchas ocasiones nuestros artículos, aquellos textos en cuya redacción hemos empleado mucho tiempo, son repicados en otros “medios” o blogs online gracias a la práctica cada día más habitual del “copy and paste”.
Es algo inherente al medio online, algo que nadie se plantea en el periodismo escrito. La rapidez con la que se puede duplicar un contenido en Internet –tan sencillo como pulsar las teclas CTRL+C y CTRL+V- hace creer a muchos editores de blogs e incluso de importantes medios de comunicación que pueden apropiarse de cualquier contenido en la red. Ilícitamente.
Existe la norma no escrita en la blogosfera, entre los medios de Internet, de enlazar cuando se mencione un texto, cuando se cite un fragmento del contenido de un artículo en el que, por ejemplo, nos hemos basado para elaborar la información.
El problema es que algunos confunden la cita con la reproducción total de un texto. Citar un fragmento, una fuente utilizada no es copiar el 100% del texto, tal cual, del principio al final. Son muchas las publicaciones que se escudan en la norma de la “mención” para copiar un texto íntegro y posteriormente enlazar con un “Vía: ‘fuente’ ”, al final. En lugar de vía deberían poner “copiado a:”, puesto que no se trata de un artículo escrito a partir de una fuente, sino de un copiado literal. No nos confundamos.
Pero todavía se puede rizar el rizo más. Y escribo estas palabras a partir de experiencias personales con textos publicados tanto en este blog como en los medios de comunicación online en los que escribo diariamente, como director editorial de NetMediaEurope, que han sido copiados tal cual, incluso incluyendo enlaces o referencias personales del redactor.
Últimamente me he encontrado con algunas webs que se apropian directamente de un artículo, lo reproducen íntegramente en un post y eliminan la autoría original para firmarlo con el nombre de un redactor o bloguero cuya única tarea ha consistido en practicar el ejercicio del CTRL+C y el CTRL+V
Para mí eso es plagio. Lucho contra esta práctica cada día -creo que forma parte de mi trabajo como director de contenidos- sin más armas que las de contactar con el medio / blog en cuestión y pedirles que no copien los artículos completos, que mencionen, que respeten el trabajo de los demás compañeros.
Generalmente la situación se soluciona añadiendo un enlace y con una justificación echándole la culpa a algún becario de redacción “despistado” (…). Sin embargo, hay ocasiones en las que o bien no se obtiene respuesta o se obtiene una como la que me he encontrado recientemente tras llamar la atención en varias ocasiones a otro medio, a cuyo responsable solicité que no volviese a reproducir artículos escritos por ningún redactor en los medios de NetMediaEurope.
Me respondieron que era una lástima que en estos tiempos en los que se lleva compartir y ser social, adoptase esa postura. Comparto y soy social, pero ni en la actividad bloguera ni en el periodismo en Internet –ni en ningún otro entorno- compartir es sinónimo de copiar. Plagiar el trabajo de los demás y ser capaz de apropiarse de la autoría es algo muy distinto al concepto de compartir o de ser social, tanto en el mundo off como en el online. Eso tiene otro nombre.