Un indígena menor de edad murió y otros tres resultaron heridos en un campo minado por presuntos guerrilleros de las FARC
Bogotá -- Un indígena menor de edad murió y otros tres resultaron heridos en un campo minado por presuntos guerrilleros de las FARC en las montañas de la población de Florida, en el departamento suroccidental colombiano del Valle del Cauca, denunciaron hoy portavoces de la comunidad.
El suceso se presentó el domingo cuando las víctimas regresaban de visitar sitios sagrados de su comunidad, precisó a Efe por teléfono desde Cali el tesorero de la Organización Regional Indígena del Valle del Cauca (Orivac), Nilson Quitumbo.
El dirigente indígena indicó que las minas causaron la muerte de un menor de 15 años y heridas a un hermano suyo y a otros dos adolescentes, también de una misma familia.
Las víctimas pertenecen a la comunidad de Altamira, que es uno de los 17 asentamientos agrupados en los cinco cabildos mayores (autoridades) del pueblo Paez o Nasa, agregó Quitumbo, quien calculó en unas 5.400 personas la población indígena en Florida.
El portavoz de la Orivac manifestó que estas comunidades sufren los rigores del conflicto armado al menos desde 1998, con deflagraciones de explosivos, incluidas minas antipersonal, que dejan ocho muertos, incluido el menor de Altamira.
Otros tres indígenas han perdido las extremidades inferiores al caer en campos minados, agregó Quitumbo.
“Los campos minados siempre han sido dejados por las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia)”, afirmó el líder indígena. “La guerra la están haciendo contra la comunidades indígenas, lo que rechazamos”, manifestó.
Quitumbo señaló que son actos violentos que afectan en especial a la población civil y, dentro de ella, a la indígena.
En un comunicado, la ONG Campaña Colombiana Contra Minas (CCCM) denunció que con las víctimas de Florida se elevó a tres el número de niños que han muerto este año en accidentes con explosivos y a doce el de heridos.
En total, en lo que va de 2012 se han presentado cinco casos de accidentes con minas antipersonal o munición sin explotar, agregó la organización no gubernamental, e indicó que los hechos de han registrado en los departamentos de Cauca, Nariño, Putumayo, Caquetá y Valle del Cauca, todos en el sur y el suroeste del país.
“Estos accidentes muestran el alto grado de vulnerabilidad en el que se encuentran los niños en medio del conflicto”, advirtió la CCCM, y consideró que “es necesario tomar medidas urgentes para la protección de los menores e intensificar los programas de educación en el riesgo en las zonas donde el peligro es muy alto”.
Colombia es el segundo país del mundo más afectado por las minas antipersonal, según el más reciente informe de la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas (ICBL, por su sigla en inglés).
El estudio, divulgado a finales de noviembre pasado y con datos a 2010, muestra que el país andino registró en dicho año 512 víctimas fatales, frente a las 1.211 de Afganistán, que ocupa el primer lugar.