¿Quién es él (Obama) para convertirse en árbitro del bien y del mal, decidir qué es dictadura y qué es democracia?" preguntó Rafael Correa al referirse a las condiciones que ha sobre el régimen de los hermanos Castro
"¿Quién es él (Obama) para convertirse en árbitro del bien y del mal, decidir qué es dictadura y qué es democracia?", preguntó Rafael Correa al referirse a las condiciones que ha impuesto Washington sobre el régimen de los hermanos Castro.
El Presidente ecuatoriano criticó duramente a su homólogo estadounidense, Barack Obama, por pretender ser el "árbitro del bien y del mal" en América Latina.
El tema de Cuba fue debatido durante la VI Cumbre de las Américas celebrada el pasado fin de semana en Colombia y a la que no asistió Correa en solidaridad con el Gobierno de Raúl Castro, que no fue invitado por no pertenecer a la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Todos los países presentes en la cumbre de Cartagena, menos Estados Unidos y Canadá, abogaron por abrir espacio a Cuba y dejar a un lado las diferencias, sin embargo, prevaleció la postura de Washington que aclaró que estos encuentros son sólo para naciones con gobiernos democráticos. De hecho, la cita presidencial finalizó sin una declaración final por la falta de consenso sobre varios temas políticos, entre ellos, la participación del Gobierno de Castro.
Después del encuentro, Obama afirmó que dará la bienvenida a una Cuba "libre" en las próximas cumbres pero aseguró que, por ahora, el país comunista "no ha avanzado hacia la democracia" y el respeto a los Derechos Humanos. "Es mi esperanza que Cuba vea que lo que ha pasado en países como Colombia, Brasil y Chile. Cuando eso ocurra, vamos a tener los brazos abiertos en Estados Unidos", expresó.
"¡Ya basta, creo que la historia nos ha enseñado bastante sobre la doble moral en cuanto a relaciones internacionales!", expresó Correa, al señalar que entonces debería ser Estados Unidos el que comience a dar ejemplo eliminando Guantánamo que constituye el "mayor atropello a los Derechos Humanos y la soberanía de un país".
En opinión de Correa, son los cubanos los únicos que deben decidir sobre el futuro de la isla y no una potencia extranjera, al tiempo que exhortó a la Casa Blanca a poner fin al embargo "criminal" que mantiene sobre ese país. "Lo que sí es claro es que el bloqueo es un atropello al derecho internacional, a los Derechos Humanos, a la soberanía de Cuba", destacó.
El embargo comercial ha sido "condenado decenas de veces por las Naciones Unidas" sin que Estados Unidos haya acatado esas resoluciones. "Eso sí es concreto, evidente, urgente, entonces, creo que el primer paso es levantar ese bloqueo criminal", resaltó.