Hosni Mubarak, corre el riesgo de sufrir una embolia debido al deterioro de su salud en un hospital penitenciario
El expresidente egipcio, Hosni Mubarak, corre el riesgo de sufrir una embolia debido al deterioro de su salud desde que ingresó en un hospital penitenciario para cumplir cadena perpetua, informó hoy la agencia de noticias egipcia Mena.
Fuentes de seguridad de alto rango, citadas por la agencia, explicaron que un informe del equipo médico que atiende al antiguo mandatario en la cárcel de Tora, en el sur de El Cairo, señala que padece arritmia.
Además, sufre problemas respiratorios que en la última semana han obligado a los médicos a conectarle a respiración artificial durante largos periodos.
Hace tres días, fuentes médicas y de seguridad dijeron a Efe que las autoridades egipcias estudian trasladar a Mubarak desde Tora, en cuyo hospital ingresó el sábado pasado, a un centro médico fuera de la prisión por el agravamiento de su salud.
Su esposa Suzanne, que ha hecho una petición oficial para que sea trasladado, intentó hoy visitar a su marido en Tora, pero la administración de la cárcel se lo impidió por no contar con una autorización de la Fiscalía General.
Mientras, unos 200 seguidores de Mubarak se concentraron hoy frente a la Autoridad de Prisiones para demandar que el expresidente sea transferido a un hospital.
El sábado pasado, un tribunal condenó a Mubarak y al que fuera su ministro del Interior, Habib al Adli, a cadena perpetua por complicidad en la muerte de manifestantes durante la revolución que acabó con su renuncia en febrero de 2011.
En abril de ese año, Mubarak fue hospitalizado en un centro médico de Sharm el Sheij, después de sufrir un ataque cardíaco, y justo en el mismo día en que había sido interrogado y posteriormente detenido.
Con el comienzo de su juicio, el pasado 3 de agosto, Mubarak pasó del hospital de Sharm el Sheij a otro en El Cairo, el Centro Médico Internacional, donde según los medios egipcios disfrutaba de comodidades como una piscina privada, un gimnasio o un jacuzzi.