El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ofreció ayuda federal a los gobernadores de Alabama, Misisipi y Luisiana, por los daños de la tormenta Isaac.
Obama recibió este lunes un informe actualizado del administrador de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés), Craig Fugate, y del director de Centro Nacional de Huracanes, Rich Knabb, sobre los preparativos que se implementan para enfrentar el meteoro.
Obama se comunicó por teléfono con los gobernadores de Alabama, Robert Bentley; de Misisipi, Phil Bryant, y de Luisiana, Bobby Jindal, así como con el alcalde de Nueva Orleans, Mitch Landrieu, para garantizar apoyo federal, y les pidió identificar necesidades.
“En la llamada, el presidente pidió al doctor Knabb y al administrador Fugate ofrecer a los gobernadores y al alcalde una actualización de la trayectoria de la tormenta, así como de los recursos que la FEMA tiene para poyar a sus equipos”, señaló la Casa Blanca en comunicado.
Indicó que la FEMA y el Departamento de Defensa instalaron Bases de Apoyo para Incidentes en Jacksonville, Florida, y en Montgomery, Alabama, para anticipar suministros para “áreas potencialmente afectadas por el clima severo”.
Asimismo, desplegó equipos de respuesta en los cuatro estados.
Agregó que el presidente Obama informó al gobernador Jindal, que aprobó su petición de declaración de emergencia para Luisiana en anticipación al posible impacto de Isaac, que se traduciría en recursos federales adicionales a los ya implementados por FEMA.