Publicado El:Wednesday, November 28, 2012
Posteado Por MisterDj1
En su encuentro con Barack Obama el presidente electo mexicano Enrique Peña Nieto inmigración y el narcotráfico temas tradicionales en las relaciones bilaterales
En su encuentro con Barack Obama, el presidente electo mexicano, Enrique Peña Nieto, no solo abordará temas tradicionales en las relaciones bilaterales, como la inmigración y el narcotráfico, sino también otros como la colaboración en el sector energético.
“México se está quedando mucho más atrás que otras potencias energéticas globales”, señala el escritor y especialista en inmigración Raúl Hinojosa. La admisión de “inversiones extranjeras en el sector petroquímico y de exploración” fue una promesa de la campaña electoral de Peña Nieto como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), recuerda Hinojosa.
El tema energético ya fue abordado por Peña Nieto durante su gira por el resto de países norteamericanos. “Una de las áreas con el mayor potencial de cooperación entre México y Canadá es la producción y desarrollo de energía. El sector energético de México va a cambiar. Quiero mejorar su potencial abriéndolo a la inversión privada nacional y extranjera”, afirma el presidente electo en un artículo publicado en el periódico canadiense ‘The Globe and Mail’ durante su viaje a Ottawa.
“El sector energético de México va a cambiar. Quiero mejorar su potencial abriéndolo a la inversión privada nacional y extranjera.”
Además, Peña Nieto añade que no privatizará Petróleos Mexicanos, pero dará la “bienvenida a nuevas tecnologías, asociaciones e inversiones”.
Tras una reunión privada en el Despacho Oval de la Casa Blanca en Washington, el presidente recién reelegido, Obama, también afirmó que para su país, “México se ha convertido en un importante socio” en una “amplia gama de asuntos, desde la energía hasta el cambio climático”.
La gira de Peña Nieto se produce en unos momentos en que México ha reducido la emigración ilegal hacia EE.UU., además de que en 2011, la economía mexicana creció con mayor rapidez incluso que la de una potencia emergente como Brasil, según EFE.