Los restos de Yasser Arafat seran exhumado para investigar las causas de su muerte
El trabajo para exhumar el cuerpo del líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasser Arafat comenzó como parte de una investigación sobre su muerte ocurrida en 2004.
Autoridades francesas abrieron una investigación por asesinato este año tras encontrarse altos niveles de una sustancia radioactiva en algunas de sus pertenencias personales.
La investigación fue lanzada luego de que la viuda de Arafat, Suha Arafat, presentó una demanda formal por asesinato.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, aprobó subsecuentemente la exhumación del cuerpo de Arafat de su mausoleo, que se encuentra en el complejo presidencial palestino en la ciudad de Ramala, en la Ribera Occidental del Jordán.
Un equipo de CNN en la escena vio una gran carpa sobre el mausoleo, donde trabajadores comenzaron a remover la lápida.
Arafat murió a los 75 años en un hospital militar de París luego de sufrir una hemorragia cerebral que lo dejó en estado de coma. En los días previos a su muerte, funcionarios palestinos dijeron que sufría una enfermedad sanguínea —aunque descartaron leucemia— y problemas digestivos.
Los rumores sobre un envenenamiento circularon en ese entonces, pero funcionarios palestinos lo negaron.
Pero un doctor suizo dijo que algunos investigadores encontraron altos niveles del tóxico polonio 210 en algunas pertenencias personales de Arafat.
Francois Bochud, director del Instituto de Radiofísica de Lausana, Suiza, dijo que sus investigadores realizaron pruebas al cepillo de dientes, la ropa y al keffiyeh de Arafat.
Una mancha de fluido corporal contenía 180 megabecquereles por litro del isótopo radioactivo, cuando una típica muestra contiene cinco megabecquereles por litro, dijo Bochud. La radioactividad se mire en becquereles.
El tejido de la ropa de Arafat, sin fluido corporal, tenía menos de 10 megabecquereles por litro, según Bochud.
Sura Arafat dijo a CNN que quiere que se exhume el cuerpo de su marido para que los investigadores estén “100% seguros” de la presencia del polonio.
Sara Sidner contribuyó con este reporte.