El Sol vuelve a sorprender al mundo de que sigue siendo el dueño del Sistema Solar
A principios de esta semana el Sol nos recordó a todos quién era el dueño del Sistema Solar: en poco menos de 48 horas se produjeron sobre su superficie tres explosiones de la clase más alta, la X. Los científicos no pueden garantizar que con eso se haya calmado la actividad solar. Las tres erupciones que fueron una completa sorpresa avivaron considerablemente esta fase tranquila (e incluso algo aburrida) del ciclo solar. Los médicos insisten en que la razón del malestar de algunas personas no radica en las tormentas magnéticas en sí, sino en las noticias sobre la inminencia de éstas. Los datos relativos a los “caprichitos del Sol” siguen siendo buscados por decenas de miles de usuarios y causando pánico entre los más sensibles. Esta vez, las tres explosiones no iban dirigidas hacia la Tierra y pasaron de largo. No obstante, los días 15 y 16 se cruzaron en su camino dos aparatos espaciales de la NASA, la sonda espacial EPOXI y el telescopio espacial Spitzer. De modo que aquellos habitantes de la Tierra que no tienen nada que ver con estos equipos de momento pueden estar tranquilos, aseguran los científicos.
“La influencia sobre la Tierra no sólo depende de la potencia de la explosión sino de su localización sobre la superficie solar. Si el foco se encuentra en el centro del disco solar, la influencia es máxima. En el último caso se encontraba en el área oriental, el más seguro desde el punto de vista de su influencia en la Tierra, señala el colaborador del Instituto de Física Lébedev, Serguéi Bogachov.
Sin embargo, dado que el Sol va girando, las manchas inicialmente inofensivas se están haciendo cada vez más peligrosas. El observatorio espacial SOHO ya ha sido capaz de detectarlas al borde mismo del disco solar. En el plazo aproximado de una semana las manchas se colocarán en el centro del disco. No se sabe si seguirán llevando su actual carga de energía solar. Y tampoco se sabe de dónde han salido estas cantidades de energía, explica el experto.
“En cada explosión se libera una cantidad colosal de energía que ha de ser previamente acumulada. Y al producirse en un tiempo tan breve tres potentes explosiones surgen las preguntas: ¿De dónde ha venido tanta energía? ¿No se habrá agotado la fuerza del Sol?
Todo parece indicar que esta vez el Sol dará para pensar a los astrónomos que a lo largo de todo el año 2012 estaban intentando entender por qué en vez del pronosticado pico de la actividad solar reinaba la tranquilidad. Hubo quienes suponían incluso que este ciclo solar tendría dos picos, en 2011 y en 2013 y ahora con toda seguridad se están frotando las manos.
Sin embargo, la gente que en su vida cotidiana no se dedica a contar ni a observar las manchas solares no debería sucumbir al pánico ante las preocupantes noticias sobre tres erupciones en menos de dos días. No habrá problemas de salud, pero sí unas impresionantes imágenes.