El portavoz del Ministerio egipcio del Interior, Hani Abdelatif, instó hoy a los manifestantes partidarios del depuesto presidente Mohamed Mursi a que abandonen las acampadas en las plazas de Al Nahda y de Rabea al Adauiya, en El Cairo.
Un partidario del depuesto presidente egipcio Mohamed Morsi plantea un retrato de él durante una manifestación contra el gobierno actual, en El Cairo el 30 de julio de 2013
El portavoz del Ministerio egipcio del Interior, Hani Abdelatif, instó hoy a los manifestantes partidarios del depuesto presidente Mohamed Mursi a que abandonen las acampadas en las plazas de Al Nahda y de Rabea al Adauiya, en El Cairo.
“El Ministerio del Interior garantizará la salida segura y la protección completa de cada persona que responda a este llamamiento”, dijo Abdelatif en una breve intervención en la televisión egipcia.
Poco después del anuncio, un avión militar sobrevoló a altura muy baja la plaza de Rabea al Adauiya, según pudo constatar Efe.
El ambiente en el lugar era hoy tranquilo, aunque los manifestantes han reforzado las barreras y registros para acceder a la plaza, donde los partidarios de Mursi aseguran que están dispuestos a resistir.
El imán que encabezó hoy el rezo musulmán del mediodía en esta acampada afirmó desafiante que “nadie puede acercarse a Rabea al Adauiya porque lo que hay aquí son leones”.
Tanto en el interior de la plaza como en sus proximidades, los manifestantes han creado montones de piedras para utilizarlas contra las fuerzas de seguridad si intentan irrumpir.
Además, han reforzado las barreras, creadas con adoquines arrancados de las aceras, que erigieron el sábado pasado, después de los choques la madrugada de ese día con la policía que causaron ochenta muertos.
El puesto de las fuerzas del orden más próximo a Rabea al Adauiya se encuentra a unos 800 metros de la plaza en una calle que conduce al Palacio Presidencial.
En ese puesto hay apostados varios militares que han levantado una barrera con alambres de espino.
Ayer, Gobierno anunció que había decidido empezar a adoptar “las medidas necesaria” para poner fin a las acampadas pro Mursi en la capital.
Esas dos concentraciones comenzaron tras el golpe de estado militar que depuso a Mursi el pasado 3 de julio.