Bashar al Asad presidente sirio afirmó que los ataques aéreos occidentales contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) no han logrado ningún avance sobre el terreno
El presidente sirio, Bashar al Asad, afirmó que los ataques aéreos occidentales contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) no han logrado ningún avance sobre el terreno, al tiempo que aseguró que no tiene previsto abandonar la presidencia de su país.
“No se puede acabar con el terrorismo con bombardeos aéreos. Son indispensables fuerzas terrestres que conozcan la geografía y actúen al mismo tiempo. Por eso no ha habido avances reales tras dos meses de campaña de la coalición” internacional, indicó Al Asad en una entrevista con la revista francesa “Paris Match” de la que hoy se publicaron extractos.
La difusión de la entrevista -realizada el pasado sábado en Damasco- se produce el mismo día en que los países que forman la coalición aseguraran en Bruselas que su campaña contra EI “empieza a mostrar resultados” y a “detener” el avance de ese grupo yihadista en Irak y Siria.
El presidente sirio afirmó que “no es verdad” que los bombardeos occidentales estén contribuyendo a su lucha contra el terrorismo, en la que él engloba al EI y a la rebelión en su país.
“Nos habrían ayudado si hubieran sido importantes y eficaces. Somos nosotros quienes dirigimos los combates terrestres contra el EI y no hemos constatado ningún cambio, sobre todo a causa de que Turquía sigue aportando ayuda directa en esas regiones”, agregó.
Al Asad indicó que no tiene previsto abandonar la presidencia de Siria y afirmó que su pueblo “no aceptará nunca que el país se convierta en un juguete en manos de Occidente”.
El presidente sirio envió un dardo envenenado a su homólogo francés, François Hollande, de quien dijo que su cota de popularidad es próxima a la del EI.
“Ni siquiera lo conozco (a Hollande), pero no se trata de relaciones personales sino de relaciones entre Estados e instituciones en interés de ambos pueblos”, dijo.
Al Asad acusó a la administración francesa de actuar contra los intereses del pueblo sirio y del francés.
“No soy enemigo personal ni rival de Hollande. Creo que más bien es el EI el que es su rival, porque sus cotas de popularidad están muy cercanas”, afirmó.