Tropas sirias apoyadas por combatientes iraníes y del grupo libanés Hezbolá lanzaron el viernes una ofensiva al sur de la ciudad de Alepo, expandiendo su contraataque contra los rebeldes al oeste de Siria
Beitur, 16 de octubre Reuters.-Tropas sirias apoyadas por combatientes iraníes y del grupo libanés Hezbolá lanzaron el viernes una ofensiva al sur de la ciudad de Alepo, expandiendo su contraataque contra los rebeldes al oeste de Siria con la ayuda de aviones de combate rusos.
El asalto supone que el Ejército ahora está presionando a los insurgentes en varios frentes cerca de las principales ciudades occidentales de Siria, cuyo control permitiría al presidente Bashar al-Assad seguir en el poder, incluso si el este del país se mantiene bajo el dominio del Estado Islámico.
Alepo, un centro comercial e industrial cerca de la frontera con Turquía, era la ciudad más grande de Siria antes de su guerra civil de cuatro años, que derivó de las protestas contra el Gobierno de Assad.
El control de la ciudad, todavía hogar de dos millones de personas, está dividido entre el Gobierno y los rebeldes. “Esta es la batalla prometida”, dijo un alto funcionario militar del Gobierno sobre la ofensiva respaldada por cientos de efectivos de Hezbolá y fuerzas iraníes.
Se trata de la primera vez que combatientes iraníes participan a esa escala en el conflicto sirio, agregó, aunque las cifras eran modestas comparadas con las fuerzas del Ejército de Assad.
Hezbolá, que ha respaldado a Assad en numerosas batallas durante la guerra civil, dijo que el Ejército estaba llevando adelante una “vasta operación militar”, con la colaboración de cazas rusos y sirios, en un frente de al menos 15 kilómetros de ancho desde el extremo suroccidental hasta el sureste de Alepo.