El presidente de Paraguay dijo el lunes que el país debe hallar soluciones duraderas para amortiguar el efecto devastador de las inundaciones
El presidente de Paraguay dijo el lunes que el país debe hallar soluciones duraderas para amortiguar el efecto devastador de las inundaciones, después de que intensas precipitaciones anegaran zonas ganaderas y obligaran a evacuar a casi 100.000 personas.
Aunque aún no hay un cálculo sobre las pérdidas económicas que generó la mayor inundación de las últimas décadas en Paraguay, hasta ahora el país sudamericano ha sido el más afectado por las lluvias que castigan también a sus vecinos Brasil, Argentina y Uruguay como consecuencia de El Niño.
Las decenas de miles de paraguayos que dejaron sus casas estaban en refugios temporales en plazas públicas, escuelas y en instalaciones militares de la capital Asunción, esperando que llegue más asistencia mientras se pronosticaba que el nivel del río Paraguay a orillas de la capital llegara a los 8 metros.
“Tenemos en el futuro que buscar soluciones de largo plazo. Hasta ahora creo que venimos reparando y parchando para que cada inundación nos sorprenda de la misma manera y con los mismos problemas”, dijo el presidente, Horacio Cartes, sin dar mayores detalles a periodistas en su visita a la localidad de Alberdi.
El lugar, un poblado 120 kilómetros al sur de Asunción emplazado en medio de humedales, fue el más golpeado por las aguas. En esa región se cría ganado y las inundaciones no afectaban la zona de cultivo de soja, la principal exportación del país.
La principal asociación de ganaderos paraguaya dijo que los productores enfrentan problemas para comercializar los animales por el mal estado de los caminos y el avance de las aguas, pero aún no cuenta con cálculo sobre posibles pérdidas en el sector.
Muchos pobladores de Alberdi se resistían a dejar sus casas a la vera del río Paraguay por temores a saqueos, aún cuando se pronostica que la crecida seguirá y cuando un muro de contención costera comienza a agrietarse. Funcionarios anunciaron la construcción de un nuevo paredón y mejoras en caminos y puentes.
“Entre el 70 y 80 por ciento del total de la población (a la orilla del río) ya fue evacuada”, dijo a Reuters Víctor Hugo Julio, Director de Emergencias y Desastres de la Municipalidad de Asunción. “Queda una pequeña franja en la zona alta de la ribera, unas 2.000 a 3.000 familias más”.