La Policía del condado Miami-Dade comenzará a partir del próximo lunes a usar cámaras personales en los uniformes de oficiales y detectives
Miami-Dade,Florida.-La Policía del condado Miami-Dade comenzará a partir del próximo lunes a usar cámaras personales en los uniformes de oficiales y detectives.
Estas cámaras "no solo ayudarán a capturar datos valiosos que antes no estaban disponibles para nuestros oficiales, sino que ayudarán a reducir las quejas, mantener la rendición de cuentas y construir lazos de confianza y legitimidad con la comunidad", expresó Juan Pérez, jefe de la Policía de Miami-Dade.
El uso de las cámaras, aprobado por el alcalde del condado Miami-Dade, Carlos Giménez, y la Comisión del condado, se irá ampliando a partir de la próxima semana hasta llegar a 1.000 en septiembre próximo.
El Gobierno de Estados Unidos ha recomendado la incorporación de las llamadas Cámaras para Usar en el Cuerpo (BWC) con el fin de aumentar la supervisión sobre las policías.
De acuerdo con el Departamento de Justicia del país, las BWC ayudan a mejorar el servicio público de alta calidad que se espera de los agentes de policía y a promover el sentido de la justicia de procedimiento que las comunidades esperan de sus agentes.
Este cuerpo de seguridad ha sido muy cuestionado en los últimos meses en el país por la muerte de ciudadanos negros en circunstancias controvertidas a manos de policías blancos.
La incorporación de cámaras a los uniformes de los agentes se ha convertido en el reclamo de líderes afroamericanos y organizaciones de derechos civiles de todo el país desde la muerte en 2014 del joven negro Michael Brown en Ferguson (Misuri) a manos de un policía blanco.
En el condado Miami-Dade, la muerte en 2013 de un estudiante colombiano debido a una descarga eléctrica con Taser generó una serie de protestas y solicitudes del uso de cámaras personales por parte de la Policía de la ciudad de Miami-Beach.
Israel Hernández-Llach, de 18 años, murió en agosto de 2013 cuando fue sorprendido por la Policía de Miami Beach en momentos en que pintaba un grafiti en un local desocupado.