Marnie-Rae Harvey es víctima de un extraño padecimiento en el que llora lágrimas de sangre
En el Reino Unido, una adolescente llamada Marnie-Rae Harvey es víctima de un extraño padecimiento en el que llora lágrimas de sangre.
“Tengo la sensación de calor cuando mis pupilas se cubren con la sangre y esto ocasiona que no pueda ver” indica la joven. Esta extraña enfermedad no afecta exclusivamente sus ojos, sino que también lo hace con su lengua, oídos, nariz y uñas.
Un misterioso caso ha recorrido todo el Reino Unido, pues una adolescente llamada Marnie-Rae Harvey, ha sido estudiada intensamente por ginecólogos, neurólogos, pediatras y hematólogos, por ser víctima de un extraño padecimiento en el que llora lágrimas de sangre.
La joven Marnie, que acaba de cumplir 17 años de edad, vive en la localidad de Stoke on Trent, en pleno corazón de Gran Bretaña; su patología dificulta su inserción social, ya que debe quedarse encerrada en su hogar, puesto que este padecimiento le impide salir de su casa o con amigos, lo que genera que no pueda llevar una vida normal.
Todo se inició en el año 2013, cuando Marnie sufrió un repentino ataque de tos que fue acompañada de sangre. Los especialistas investigaron su caso y afirmaron que no era nada para preocuparse. Sin embargo, durante el 2015, la adolescente amaneció con todo su rostro cubierto de sangre, el cual emanaba de sus ojos.
Los paramédicos que acudieron a la casa de la chica, no salían de su asombro ya que jamás habían visto un caso similar.
“Al llegar al hospital, me hicieron una revisión completa en mis ojos, pero según los doctores no tenía ninguna anormalidad en ellos. Si bien había derramado lágrimas de sangre, la estructura de mi ojo se mantenía intacta” afirmo Marnie Rae.
Luego de ese episodio, los ojos de la adolescente derramaron sangre durante más de dos semanas consecutivas, lagrimeando todos los días. Hasta que un día mientras la joven iba de compras con su familia sufrió un episodio más grave, en donde sus ojos y oídos empezaron a emanar sangre. “tuvimos que llamar nuevamente a la ambulancia” relata la chica.
Después de ese último incidente, las visitas a hospitales y los exámenes médicos se multiplicaron, aunque no hubo resultado que pudiera explicar el origen de este extraño síntoma. Al día de hoy, la niña sigue sin respuesta médica y su patología se ha vuelto todo un karma para ella quien contó que “mientras esperaba al doctor, sufrí otro ataque y la gente me miraba con desprecio y me fotografiaba, mirándome como si fuera un bicho raro”.