Omar Mateen visito varias veces el club PULSE de Orlando antes de cometer el ataque y usaba apps gays.
Mateen llevaba una gorra oscura y hablaba por teléfono, les contó West a los medios de comunicación locales.
Se saludaron con un escueto "hey".
Se habían conocido hacía un año, a través de la aplicación de citas para hombres Jack'd, explicó West.
Y aunque luego le perdió la pista, lo había visto en varias ocasiones en el Pulse, un club nocturno en el que se reunía la comunidad LGTB de la ciudad.
Kevin West estaba en el parking de Pulse, un club nocturno de Orlando, en Florida, Estados Unidos, cuando vio a Omar Mateen entrar al establecimiento.
Era la una de la madrugada del domingo y poco podía imaginarse que en una hora aquél hombre abriría fuego en el local, y que terminaría siendo el autor del tiroteo más sangriento de la historia reciente de EE.UU.
"Así que lo reconocí en seguida", aseguró este veterano de la Marina de 37 años. "Recuerdo los detalles. Nunca olvido una cara".
"Asiduo en el bar"
Nada más saber del tiroteo, West corrió a la comisaría local.
Allí, los policías convocaron a agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), quienes le mostraron una foto de Mateen en la pantalla de una computadora.