DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos.-El gobernador de La Meca, el príncipe Faisal bin Salman, que es uno de los hijos del rey Salman, fue mostrado en la televisión estatal visitando a los agentes heridos en la explosión en Medina, así como el lugar de la explosión pocas horas después del estallido.

Ningún grupo ha reivindicado los ataques en Medina y Yeda, así como tampoco ocurrió con un coche bomba que estalló cerca de una mezquita chií en el este del país.

Las características de los ataques y su aparente cronometraje coordinado parecieron indicar que el grupo Estado Islámico podría estar detrás.

Un comunicado del Ministerio del Interior emitido el martes identificó al autor material del ataque en Yeda como Abdullah Qalzar Khan, de 34 años. Agregó que el hombre vivía en la ciudad portuaria de Yeda, en el mar Rojo, con "su esposa y los padres de ella", sin ofrecer más detalles.

En ese ataque, el agresor detonó sus explosivos después de que dos guardias de seguridad se le acercaron. El estallido lo mató y causó heridas leves a los dos guardias, dijo el Ministerio del Interior. Ningún miembro del personal consular resultó herido.

El autor de un ataque suicida cerca del consulado estadounidense en Yeda era un residente paquistaní que llegó a Arabia Saudí hace 12 años para trabajar de conductor, reveló el martes el gobierno saudí.

El atentado suicida cerca de la sede diplomática fue el primero de tres ataques ocurridos el lunes en el reino, entre ellos uno fuera de los terrenos de la enorme mezquita donde fue enterrado el profeta Mahoma en la ciudad occidental de Medina. Ese atentado mató a cuatro soldados y cinco resultaron heridos. Millones de musulmanes de todo el mundo visitan la mezquita todos los años como parte de su peregrinación a La Meca.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores paquistaní, Nafees Zakaria, dijo que las autoridades en Islamabad estaban trabajando para obtener más detalles del hombre. Condenó los ataques y expresó su solidaridad con Arabia Saudí, diciendo que el reino valora las contribuciones de los trabajadores paquistaníes que trabajan en el reino con permiso.

"El terrorismo es un fenómeno mundial y no afecta a un país o a personas específicas", agregó Zakaria.

Unos 9 millones de extranjeros viven en Arabia Saudí, que tiene una población total de 30 millones. Entre todos los extranjeros que viven en el reino, los paquistaníes representan uno de los grupos más grandes.

Los periodistas de The Associated Press Adam Schreck y Jon Gambrell en Dubái, Munir Ahmed en Islamabad y Nasser Karimi en Teherán contribuyeron a este despacho.

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DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos.-Una torre de gran altura se incendió el lunes en Ajmán, en los Emiratos Árabes Unidos, el último en una serie de estos siniestros en los rascacielos de la nación del Golfo que es sede del edificio más alto del mundo.

Imágenes compartidas en las redes sociales mostraron las llamas amarillas brillantes que se extendían por el lado del edificio, mientras caían al suelo pedazos del inmueble.

El ministro del interior de los Emiratos, el jeque Saif bin Zayed Al Nahyan, se apresuró a Ajmán para ayudar a coordinar la respuesta al incendio, dijo la policía de Ajmán. No hubo informes inmediatos sobre víctimas.

Ajmán es hogar de muchas personas que trabajan en la cercana ciudad comercial del Golfo, Dubái, más al sur. Al igual que Dubái, es uno de los siete emiratos que conforman la federación de los Emiratos Árabes Unidos.

La policía acordonó un camino principal cercano a la torre, lo que afectó el tráfico. Cientos de residentes evacuados y curiosos se amontonaron para observar el edificio en llamas.

El periódico Gulf News, con sede en Dubái, citó al director de defensa civil de Ajmán, brigadier Saleh Saeed al-Matroushi, diciendo que los bomberos estaban en el lugar trabajando para apagar el fuego. Un funcionario de defensa civil consultado por The Asscoiated Press confirmó que los esfuerzos de los bomberos seguían en curso entrada la noche pero no dio mayores detalles.

El incendio se presentó menos de tres meses después que un incendio masivo ocurrió en el exterior del The Address Downtown de Dubái, uno de los hoteles más prominentes de la ciudad con sus 63 pisos, el cual está situado a un costado del centro comercial más grande de Dubái y el Burj Khalifa, el rascacielos más alto del mundo.

Siniestros similares han golpeado otros edificios de gran altura desde el inicio de este siglo en Dubái y Sharjah, emirato que se sitúa entre Dubái y Ajmán.

Expertos en construcción y seguridad han atribuido la serie de incendios al material utilizado comúnmente para recubrir los edificios, conocido como revestimiento de panel compuesto de aluminio. Algunos paneles utilizados en los edificios de los Emiratos contienen un núcleo inflamable que puede arder rápidamente una vez que se prende, permitiendo que los incendios se propaguen con velocidad en edificios cubiertos de arriba abajo con los paneles sin suficientes cortafuegos en el camino.

No estaba claro de inmediato si el rascacielos en el incendio de Ajmán tenía el tipo de revestimiento, pero las imágenes publicadas en las redes sociales al parecer muestran que arde en una forma similar.

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