Doctores de Estados Unidos ha desarrollado un tratamiento experimental que mata el cáncer en pacientes con leucemia incurable
A Marshall Jensen le diagnosticaron leucemia linfoblástica aguda a principios de 2012. Fue entonces cuando comenzó la búsqueda de un tratamiento eficaz y, después de viajar por todo EE.UU. para someterse a operaciones y procedimientos sin éxito, se enteró de que investigadores de la escuela Penn Medicine de la Universidad de Sistema de Salud de Pensilvania (University of Pennsylvania Health System) habían desarrollado un tratamiento experimental que mata el cáncer en pacientes con leucemia incurable, informa la página web de la emisora KSL.
Las investigaciones de Penn Medicine, dirigidas por el doctor Carl June, se centran en el uso de las propias células inmunes del paciente, conocidas como células T, un tipo de células blancas de la sangre y el VIH, el virus que causa el sida.
"Es un virus con discapacidad. Pero conserva la característica esencial del VIH, que permite insertar nuevos genes en las células", explica June.
De acuerdo con el médico, la terapia experimental, llamada inmunoterapia de células T, funciona mediante la eliminación de miles de millones de células T de la sangre del paciente y a modificarlas genéticamente con una forma desactivada del VIH elaborada en laboratorio. Las células modificadas, ahora llamadas células CTL019, se cultivan en el laboratorio y se vuelven a infundir en el paciente.
Esta modificación o reprogramación les permite a estas células identificar sus propias células malignas y, cuando se unen con ellas, tienen la capacidad de activarse y matarlas, explican en el Centro de Cáncer Abramson.
June ha señalado que las células CTL019 son unos "asesinos en serie" que permanecen en el cuerpo en estado latente en el caso de que regrese el cáncer.
Las investigaciones de Penn Medicine, dirigidas por el doctor Carl June, se centran en el uso de las propias células inmunes del paciente, conocidas como células T, un tipo de células blancas de la sangre y el VIH, el virus que causa el sida.
"Es un virus con discapacidad. Pero conserva la característica esencial del VIH, que permite insertar nuevos genes en las células", explica June.
De acuerdo con el médico, la terapia experimental, llamada inmunoterapia de células T, funciona mediante la eliminación de miles de millones de células T de la sangre del paciente y a modificarlas genéticamente con una forma desactivada del VIH elaborada en laboratorio. Las células modificadas, ahora llamadas células CTL019, se cultivan en el laboratorio y se vuelven a infundir en el paciente.
Esta modificación o reprogramación les permite a estas células identificar sus propias células malignas y, cuando se unen con ellas, tienen la capacidad de activarse y matarlas, explican en el Centro de Cáncer Abramson.
June ha señalado que las células CTL019 son unos "asesinos en serie" que permanecen en el cuerpo en estado latente en el caso de que regrese el cáncer.