Esta es la primera vez que H&M, el segundo minorista más grande del mundo, ha mostrado a una modelo musulmana con un hiyab en un video diseñado para animar a los consumidores a reciclar su ropa. Y esto ha abierto el debate sobre los musulmanes en la moda.
Según lo esperado, el video, lanzado anteriormente este mes y titulado Close the Loop, es una impecable producción de la marca sueca. Escenas urbanas, atuendos elegantes y modelos de varias nacionalidades, géneros y tallas.
De hecho, también fue el debut de la mujer musulmana en el modelaje.
Mariah Idrissi, de 23 años de edad, nacida y criada en Londres de madre pakistaní y padre marroquí, logró que su foto fuera enviada a H&M gracias a su amigo director de casting.
"Era algo de una sola vez, no tenía pensado que se volviera tan grande", le dice a CNN entre risas. Y parece que la gran casa de moda también había investigado.
"Me sorprendió que ellos en realidad supieran cómo debería ir vestida. Entendieron que tenía que ser muy holgado, nada ajustado ni revelador. Dieron un rango de atuendos distintos. En cierta forma insinué cuáles me gustaban, y todos ellos eran muy respetables", dice.
Algunas personas dicen que modelar entra en conflicto con las creencias islámicas tradicionales. Idrissi no está de acuerdo.
"He visto unos cuantos comentarios donde las personas se oponen, pero no hay nada que diga que hay algo en contra de eso. En nuestra religión, cualquier cosa que no esté establecida como prohibida es permisible", dice.
"Siempre y cuando esté vestida correctamente, de acuerdo con el Islam, no hay problema", añade. "Simplemente se trata de promover el hiyab, de cierta forma. Así que en todo caso es algo bueno".
H&M no quiso hacer comentarios, pero dijo lo siguiente en una declaración a CNN: "No trasladamos ningún ideal específico o animamos la elección de un estilo de vida, que es lo que el video Close the Loop muestra; no hay reglas en la moda excepto una".
Mariam Veiszadeh, una abogada musulmana, escritora y defensora de los musulmanes, quien está radicada en Australia, le dice a CNN que aún se necesita trabajar más: "Las mujeres musulmanas siguen enfrentando otras barreras en muchas industrias. Las mujeres pueden enfrentar un techo de cristal cuando de la fuerza laboral se trata, pero las mujeres de color tienen que enfrentarse a un techo de concreto".
"Espero con entusiasmo el día en el que una modelo vestida con un hiyab ya no sea noticia importante".
El anuncio podrá ser noticia importante, pero también tiene sentido en los negocios. Los musulmanes gastaron 266.000 millones de dólares en ropa y calzado en 2013, según Thomson Reuters. "Creo que es un desarrollo fantástico en el posicionamiento de marca de H&M", dice Shelina Janmohamed, vicepresidenta de Ogilvy Noor, una consultora especialista para el desarrollo de marca con los consumidores musulmanes.
"Sabemos que en muchos países donde ellos (H&M) tienen presencia y como marca global, las consumidoras jóvenes musulmanas son un creciente grupo demográfico y cuando hemos hablado con jóvenes musulmanas, ellas sienten que no son representadas en la identidad global de la moda de hoy en día".
Janmohamed dice que su investigación demuestra que la publicidad no tiene que ser explícita cuando se enfocan en las mujeres musulmanas. "Ellas no necesitan algo que diga 'Mujer musulmana: esto es para ti'. Lo que quieren ver es que las traten como a cualquier otro consumidor".
El próximo paso sería que otros minoristas importantes sigan los pasos de H&M, argumenta. "Es tanto lo que se menciona en las noticias y en las discusiones políticas acerca de los musulmanes que las marcas comprensiblemente se sienten un poco nerviosas acerca de ponerse en contacto con las audiencias musulmanas".
"Yo los animaría a ser valientes y audaces, y verán que las audiencias musulmanas son extremadamente receptivas y muy leales".
Sin embargo, aún existen opiniones opuestas que circulan acerca del mensaje del anuncio.
Sin embargo, otros reciben el cambio.
Entonces, ¿cuál es el consejo de Idrissi para otras musulmanas aspirantes a modelos?
"Yo diría que tienen que asegurarse de que sus intenciones sean correctas en términos de por qué lo están haciendo. El hiyab no es una moda", dice. "Podemos ajustarlo a la moda, pero tenemos que recordar que el único propósito del hiyab es ser modesto".
"Si sabes que no has corregido tu interior primero, no tiene sentido ponerse un hiyab por el lado de la moda. Porque entonces estás derrotando al objeto".