La temporada de fin de año los estadounidenses no gastaran si no encuentran mayores ofertas
NUEVA YORK (AP) -- En esta temporada de fin de año, los estadounidenses podrían abstenerse de gastar si no encuentran mayores ofertas.
A pesar de los indicios de una mejora de la economía, las cadenas gigantes como Wal-Mart y Kohl's prevén poco ánimo entre los consumidores si éstos no ven grandes rebajas resaltadas en letreros en rojo.
La situación ha derivado en la realización adelantada y más a menudo de grandes acontecimientos de ventas que en otras temporadas de fin de año para atraer compradores.
Las tiendas intentarán seducir a compradores como Marissa Anwar, que intensificó su búsqueda de baratas en comparación con el año pasado.
La asesora de operaciones, que vive en Toronto y la ciudad de Nueva York, dijo que ha perdido clientes y que la economía "no ha estado muy bien". Como resultado, ella redujo su presupuesto de compras de 4.000 dólares el año pasado a 2.800 dólares en el actual.
"Antes era una compradora compulsiva", dijo Anwar, de 29 años. "Ahora, quiero garantizar que tenga el dinero antes de gastarlo", agregó.
Las grandes minoristas conocen muy bien este problema. Desde el inicio de la recesión a finales de 2007, las tiendas han tenido que ofrecer a los estadounidenses que enfrentan limitaciones financieras mayores descuentos que nunca para que vayan a las tiendas.
Sin embargo, esos descuentos merman las ganancias.
A la fecha, Wal-Mart, Target y Kohl's figuran entre más de dos decenas de cadenas importantes que redujeron las proyecciones de sus ganancias para el trimestre o el año.
Una gran razón es la expectativa de que tendrán que ofrecer grandes rebajas para invitar a gastar a los clientes.
Ya hay indicios de que los minoristas ofrecerán grandes descuentos.
Wal-Mart, por ejemplo, comenzó el viernes a igualar o mejorar los precios que ciertos competidores como Best Buy han anunciado para algunos juguetes y aparatos electrónicos para la jornada de rebajas posterior al Día de Acción de Gracias, conocida como Viernes Negro.
Best Buy también tiene planes para igualar los precios de la competencia, incluso después de que los consumidores hicieran compras.
Target, famosa por su caprichosa publicidad, anuncia sus precios en mensajes televisivos de fin de año por primera vez en al menos una década.
Las expectativas relativizadas, descuentos adelantados y proyecciones de menores ganancias de los minoristas tienen lugar pese a los indicios de una recuperación de la economía.
El mercado de trabajo logra progresos, el mercado de vivienda se recupera y la bolsa de valores continúa logrando altos niveles históricos. Todos estos son factores que propiciarían un mayor gasto entre los estadounidenses.
Pero hasta ahora, esas mejorías no han sido suficientes para reforzar la confianza de los consumidores. De hecho, ese indicador está en su nivel más bajo desde abril.
Algunos estadounidenses han recibido menores ingresos debido al aumento del 2% en el impuesto a la nómina que comenzó a cobrarse el 1 de enero. Para un hogar con ingresos de 50.000 dólares, eso significa una reducción de unos 1.000. Esa preocupación fue subrayada por Wal-Mart el 14 de noviembre cuando redujo su guía de rendimientos por segunda vez en tres meses.
El periodista de The Associated Press, Writer Chris Rugaber, en Washington, contribuyó a este despacho.
Anne D'Innocenzio
© 2013, La Prensa Asociada.
A pesar de los indicios de una mejora de la economía, las cadenas gigantes como Wal-Mart y Kohl's prevén poco ánimo entre los consumidores si éstos no ven grandes rebajas resaltadas en letreros en rojo.
La situación ha derivado en la realización adelantada y más a menudo de grandes acontecimientos de ventas que en otras temporadas de fin de año para atraer compradores.
Las tiendas intentarán seducir a compradores como Marissa Anwar, que intensificó su búsqueda de baratas en comparación con el año pasado.
La asesora de operaciones, que vive en Toronto y la ciudad de Nueva York, dijo que ha perdido clientes y que la economía "no ha estado muy bien". Como resultado, ella redujo su presupuesto de compras de 4.000 dólares el año pasado a 2.800 dólares en el actual.
"Antes era una compradora compulsiva", dijo Anwar, de 29 años. "Ahora, quiero garantizar que tenga el dinero antes de gastarlo", agregó.
Las grandes minoristas conocen muy bien este problema. Desde el inicio de la recesión a finales de 2007, las tiendas han tenido que ofrecer a los estadounidenses que enfrentan limitaciones financieras mayores descuentos que nunca para que vayan a las tiendas.
Sin embargo, esos descuentos merman las ganancias.
A la fecha, Wal-Mart, Target y Kohl's figuran entre más de dos decenas de cadenas importantes que redujeron las proyecciones de sus ganancias para el trimestre o el año.
Una gran razón es la expectativa de que tendrán que ofrecer grandes rebajas para invitar a gastar a los clientes.
Ya hay indicios de que los minoristas ofrecerán grandes descuentos.
Wal-Mart, por ejemplo, comenzó el viernes a igualar o mejorar los precios que ciertos competidores como Best Buy han anunciado para algunos juguetes y aparatos electrónicos para la jornada de rebajas posterior al Día de Acción de Gracias, conocida como Viernes Negro.
Best Buy también tiene planes para igualar los precios de la competencia, incluso después de que los consumidores hicieran compras.
Target, famosa por su caprichosa publicidad, anuncia sus precios en mensajes televisivos de fin de año por primera vez en al menos una década.
Las expectativas relativizadas, descuentos adelantados y proyecciones de menores ganancias de los minoristas tienen lugar pese a los indicios de una recuperación de la economía.
El mercado de trabajo logra progresos, el mercado de vivienda se recupera y la bolsa de valores continúa logrando altos niveles históricos. Todos estos son factores que propiciarían un mayor gasto entre los estadounidenses.
Pero hasta ahora, esas mejorías no han sido suficientes para reforzar la confianza de los consumidores. De hecho, ese indicador está en su nivel más bajo desde abril.
Algunos estadounidenses han recibido menores ingresos debido al aumento del 2% en el impuesto a la nómina que comenzó a cobrarse el 1 de enero. Para un hogar con ingresos de 50.000 dólares, eso significa una reducción de unos 1.000. Esa preocupación fue subrayada por Wal-Mart el 14 de noviembre cuando redujo su guía de rendimientos por segunda vez en tres meses.
El periodista de The Associated Press, Writer Chris Rugaber, en Washington, contribuyó a este despacho.
Anne D'Innocenzio
© 2013, La Prensa Asociada.