Las autoridades de Miami-Dade anunciaron el arresto de 21 personas por accidentes de transito fraudulentos en Miami
Las autoridades de Miami-Dade anunciaron el miércoles el arresto de 21 personas, incluido un médico, acusados de planificar choques vehiculares y luego fingir tratamientos médicos con el fin de estafar a compañías de seguro de automóviles.
A este grupo se le acusa de organizar cinco accidentes y reclamar unos $400,000 por servicios médicos que nunca ocurrieron en cuatro clínicas del condado Miami-Dade.
“Para mucha gente, este es un delito invisible porque no hay cadáveres, armas de fuego, cuchillos y a veces tampoco hay testigos”, dijo Katherine Fernández Rundle, fiscal general de Miami-Dade, durante una conferencia de prensa el miércoles. “Pero este fraude nos afecta a todos, sale de nuestros bolsillos a la hora de pagar por el seguro vehicular. Lo pagamos como consumidores”.
Fernández Rundle dijo que este caso es especial porque uno de los acusados es médico, el doctor Hugo D. Goldstraj, de 66 años, y director médico de la clínica Clark Medical Services, 10344 W. Flagler Street.
Según el reporte de arresto, Alejandro Rojo fue quien reclutó a la personas que participaron en el accidente realizado en La Pequeña Habana el 25 de octubre del 2011. Una de las participantes fue su hija, Dayami Rojo.
Amado Ramos Bouso, quien coordinó el choque, aparentemente no creyó que fue lo suficientemente grave y les pidió a sus cómplices que volvieran a chocar antes de llamar a la policía, de acuerdo con el informe de arresto.
“Le dijo al [Testigo 1] que debía pegarle más duro al vehículo porque no sufrió lo suficiente con el impacto la primera vez”, según el informe.
Después del choque, el participante conocido como el Testigo 1 visitó la clínica Clark, donde se le pidió que firmara formularios en blanco, según el informe. La secretaria de la clínica, Dusleivys C. Hernández, también fue acusada en el caso.
El Testigo 1, quien colaboró con la investigación, reportó que jamás recibió tratamiento del masajista Emilio Gómez o del Goldstraj, a pesar de que la clínica cobró por estos supuestos servicios.
Otro participante, conocido como el Testigo 2, dijo que fue con Bernardo Valdés a la clínica Emoge Medical Services, ubicada en el 8247 NW 36 Street. Allí, llenó varios formularios y recibió una receta para un medicamento para la presión firmada por Carlos M. Millán, un asistente médico. Sin embargo, según las autoridades, Millán nunca habló con esta persona y fue arrestado.
Las autoridades también acusaron a Aurora Hernández, dueña de la clínica Magic Hands Medical Services, localizada en el 5200 SW 8 Street, por su participación en las supuestas estafas, al igual que los terapistas Alexei Ariosa Alvarez y Rafael A. Meana, empleados de esa institución. Alain Reyes, Osmel Carmona y Bárbara Delgado Echevarría participaron en los accidentes que involucraron a Magic Hands, según las autoridades.
Finalmente, el terapeuta Diego Vila de la clínica New Life Rehab Services, ubicada en el 6955 NW 77 Avenue, también fue acusado por su complicidad en la estafa. Los participantes en los accidentes que involucraron a New Life eran Osvaldo Rodríguez, Julia Rivero, Roberto Rivera y Israel Ocanto Leiro.
La investigación fue realizada por la División de Fraude de Seguros del Departamento de Finanzas de la Florida. Dan Anderson, director de la división, consideró como un crimen organizado las estafas a las aseguradoras.
Agregó que la mayoría de los casos de fraude que su oficina investiga ocurren en Miami-Dade.
“En los primeros 10 meses de este año fiscal, hemos realizado más de 500 arrestos”, dijo Anderson. “De esos, más de 200 de los casos están siendo procesados por la Fiscalía de Miami-Dade”.