Hermine tocó tierra al este de St. Marks, en la costa noroeste de Florida como huracán categoría uno e inmediatamente perdió fuerza y se vio degradada a tormenta tropical.
El gobernador del estado, Rick Scott, había advertido los peligros que representa la tormenta, el primer huracán en llegar a Florida desde Vilma, en octubre de 2005.
Hermine tocó tierra al este de St. Marks, en la costa noroeste de Florida, como huracán categoría uno, pero casi inmediatamente perdió fuerza y se vio degradada a tormenta tropical.
La tormenta entró a tierra a la 1:30 a.m., con fuertes lluvias y vientos de 130 kph que causaron cortes de electricidad e inundaciones en algunas partes.
Se esperan mareas de hasta tres metros de altura y unos 25 cm de lluvias que podrían afectar incluso a la capital del estado, Tallahassee.
El gobernador del estado, Rick Scott, había advertido los peligros que representa la tormenta, el primer huracán en llegar a Florida desde Vilma, en octubre de 2005.
“Lo más importante en lo que debemos centrarnos es que esto es peligroso”, dijo Scott. “No hemos tenido un huracán en años, hay gente que se ha mudado aquí y tenemos visitantes”.
Ciertamente, la población de Florida aumentó en 2 millones de personas desde 2005.
Scott declaró un estado de emergencia en 51 condados de Florida, mientras el presidente Barack Obama pidió que la Agencia de Manejo de Emergencias, FEMA, lo mantenga al tanto de la tormenta.
A las 5:00 de la mañana, Hermine, ya debilitada, se movía sobre el sur de Georgia, a 21 kph. Sus vientos habían disminuido también a 112 kph.
De acuerdo al Centro Nacional de Huracanes, la tormenta recorrerá buena parte de la costa este de Estados Unidos, desde Florida hasta New Jersey, antes de virar hacia el mar y afectará con lluvias ciudades como Washington, Baltimore y Filadelfia.