Pakistán condenó a muerte a Imran Ali a cuatro penas capital por secuestro asesinato y violacion de una niña de siete años
La justicia de Pakistán condenó a muerte al asesino y violador de una niña de siete años. La muerte de la menor a principios de enero conmocionó el país y provocó una ola de manifestaciones.
Un tribunal de la ciudad de Lahore sentenció a Imran Ali a cuatro penas capital por secuestro, violación, asesinato y terrorismo, y a cadena perpetua por "acto antinatural" con una menor, así lo informó el fiscal general del Punyab, Syed Ehtesham Qadir.
Las autoridades arrestaron a Alí el 23 de enero tras tomar muestras de ADN a 1.150 personas y lo acusaron del asesinato de la niña, Zainab Ansari. El acusado también es sospechoso por otras muertes en el área.
Los residentes de la zona indicaron que el asesinato de Zainab fue el duodécimo incidente de este tipo en un año. Los investigadores policiales informaron que habían combinado el ADN de ocho cuerpos de niñas, incluida Zainab, con el asesino convicto, Ali.
Cientos de residentes salieron a las calles para protestar después de que la policía encontró el cadáver de Zainab en un basurero en el distrito de Kasur, cerca de la ciudad de Lahore, a mediados de enero. El cuerpo fue hallado cuatro días después de que la denunciaran como desaparecida. Dos personas murieron cuando la policía disparó para dispersar las protestas.
Posteriormente, la policía identificó a Ali como uno de los vecinos de Zainab.
Las autoridades descubrieron una red de pedófilos en el mismo distrito
En 2015, después de recibir varios reportes de niños desaparecidos en el mismo distrito, Kasur, las autoridades descubrieron una red de pedófilos vinculada a una prominente familia local. El descubrimiento reveló que al menos 19 niños fueron grabados en video y fotografiados.
Al menos dos personas han sido condenadas con relación a este caso, en el cual las autoridades dicen que cientos de niños en el distrito fueron abusados.
Según un informe del Ministerio de Derechos Humanos elaborado junto a la ONG Sahil, Pakistán registró al menos 17.862 casos de abuso sexual a menores entre 2013 y 2017, 10.620 de ellos contra niñas y los 7.242 restantes contra varones.
El caso de Zainab ha provocado un debate en Pakistán sobre si se debe enseñar a los niños como protegerse contra el abuso sexual, que en la cultura musulmana es un tema tabú.