La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) esta semana alertaba de que las bebidas de más de 65 ºC pueden causar cáncer.

En cambio, si se trata de agua templada o tibia, los beneficios para la salud son varios. Estos son los principales, según el portal Medical Daily:

1- Favorece la digestión: Beber una taza de agua caliente por las mañanas sirve para eliminar las toxinas del cuerpo. El agua tibia ayuda a descomponer los alimentos en el estómago más rápidamente y hacerlos más digestibles. El agua fría, en cambio, tiene un efecto negativo: endurece las grasas de los alimentos consumidos y provoca que se acumule en el estómago.

2- Combate el estreñimiento: Beber agua tibia o caliente con el estómago vacío ayuda a mejorar los movimientos intestinales, por lo que las comidas pasarán por los intestinos con mayor facilidad.

3- Alivia el dolor: Tanto el dolor de cabeza como el dolor menstrual pueden aliviarse gracias al agua tibia. Tiene un efecto calmante y relajante sobre los músculos abdominales, lo que puede proporcionar a su vez alivio para calambres o espasmos musculares. El agua tibia hace que mejore la circulación de la sangre y con ello se relajan los músculos contraídos.

4- Elimina el exceso de peso: El agua templada aumenta la temperatura corporal, por lo que aumenta la tasa metabólica, de manera que se queman más calorías. Lo mejor es beberla por la mañana, incluso con limón, porque así ‘ataca’ al tejido adiposo y la pectina del limón tiene un efecto saciante.

5- Mejora la circulación sanguínea: Los depósitos de grasa en el cuerpo se eliminan con un vaso de agua tibia. Esto limpia las toxinas que circulan por el cuerpo y así mejora la circulación sanguínea.

6- Detiene el envejecimiento prematuro: Las toxinas son las que pueden provocar el envejecimiento. El agua tibia o templada las elimina y repara las células de la piel, haciéndolas más elásticas.

Científicos dicen que el mundo experimenta una escasez de agua dulce y que solo empeorará debido al incremento en la población y el cambio climático.Los expertos discuten la severidad del problema y posibles soluciones, ante las fuertes sequias que hoy se detectan gracias a imágenes de satélite.Las fuertes sequías que se presentan en el oeste de Estados Unidos es el tema del diario vivir.

Kevon Wattier, ex gerente del departamento del acueducto de Long Beach “es claramente la sequía más grande en la historia de California”.

Sin embargo, el oeste de Estados Unidos no es el único lugar sediento en el mundo.

“Más de la mitad de la población del mundo vive en áreas carentes de agua y, de acuerdo a Naciones Unidas, ese número aumentará, en dos terceras partes, para 2025”, afirma Jerry Schubel, del Acuario del Pacífico.

Imágenes de la revista National Geographic ilustran la necesidad de agua en el mundo y la Fundación Annenberg organizó una exhibición que muestra la escasez mundial.

Según Camille Lowry, de la fundación Annenberg, “la idea de que algunas personas tienen que dedicar toda su vida, su día completo, recorriendo kilómetro tras kilómetro, en busca de agua, es inconcebible”.

Expertos como Schubel consideran que el problema de la falta de agua potable en el mundo puede ser resuelto solo si los países trabajan al unísono.

“Podríamos suplir agua potable a todos en el planeta, lo suficiente como para cultivar su propio sustento, pero se necesita dinero, tecnología, voluntad política y cooperación entre los gobiernos del mundo”, enfatiza Schubel.

El agua es el componente esencial de todos los tejidos del cuerpo: la sangre contiene un 80 % de agua; el tejido muscular un 75 %; la grasa corporal un 20 %; e incluso, los huesos contienen un 22% de agua.

Además de calmarnos la sed, la primera señal de alerta de deshidratación, el agua es necesaria para que las células y tejidos del organismo funcionen correctamente. De hecho, todos los procesos que se producen dentro del cuerpo tienen lugar en un medio acuoso.

Muchas veces pensamos que el tomarnos un vaso de jugo, refresco, cerveza o cualquier otra bebida líquida, que no sea necesariamente agua, pensamos que estamos consumiendo los líquidos necesarios que el cuerpo requiere, cuando en realidad no es así. El agua tiene su propia función nutricional. 

El agua cumple con numerosas funciones en el organismo, entre las que se incluyen: el transporte de nutrientes y sustancias como vitaminas hidrosolubles, dar cierta estructura a las células y la regulación de la temperatura corporal. A través de la transpiración, se pierde calor a medida que el agua se evapora en la piel.

Una de las maneras más fácil de saber qué cantidad de agua debemos de consumir es hacer la siguiente formula; toma tu peso corporal, divídelo en dos y el número que obtengas será la cantidad de agua en onzas que debes consumir. No es de que si por ejemplo te dice que consumas 62 onzas de agua, vas a tomar 31 onza de agua y las otras 31 onza de jugo, refrescos, cervezas, café y otras cosas. Puedes consumir estos líquidos de vez en cuando, pero si lo haces de estas maneras no va ayudar a tu cuerpo a funcionar como debe de hacerlo todos los días para una mejor salud.

Además el agua ayuda mucho con la pérdida de peso o simplemente mantener tu peso deseado. También a tener una piel más radiante, a desechar las toxinas de tu cuerpo más rápido, al estreñimiento, así como al funcionamiento de tus órganos al máximo, ayudando el aceleramiento de tu metabolismo.

¿Sabes la cantidad de calorías innecesarias que consumes cuando decides tomar un vaso de jugo embotellado? ¿O de refrescos, o cervezas? Mínimo unas 100 calorías, y no quieran saber la cantidad de azúcar que les ponen a estas bebidas procesadas.

Si deseas tomar un vaso de jugo, prepáralo tú casa de forma natural sin tener que añadirle nada más que solo agua y hielo. Y si lo quieres más concentrado solo añádele hielo. Lo disfrutaras mejor y sabrás lo que le estas poniendo a tu cuerpo tu cuerpo.
  
La mejor manera de hidratarse es a través del AGUA. Los jugos y la leche son también buenas opciones de bebidas ya que aportan otros nutrientes como calcio y vitamina c. Las bebidas con cafeínas, tales como las gaseosas cola, café, te o mate así como las alcohólicas, actúan como diuréticos, lo que provoca la pérdida de líquido más rápidamente.

Unas de mis rutinas diarias es que al levantarme siempre tengo un vaso de agua en mi mesita de noche y es lo primero que tomo. Al tomar agua temprano en la mañana ayuda a mi cuerpo a desechar las toxinas acumuladas del día o la noche anterior. Otra cosa que hago siempre es mantener un galón de agua conmigo durante el día, de esta manera aseguro que me estoy tomando la cantidad de agua que necesito.

Un consejo más, antes de cada comida es recomendado tomar un vaso de agua para así también evitar comer de más.

Crea un sistema que trabaje para ti, usa tu celular como recordatorio que debes de tomar un vaso de agua cada dos o tres horas. Utiliza lo que creas que pueda funcionar para ti de acuerdo a tu estilo de vida, para que entonces puedas crear nuevos hábitos y una nueva disciplina en consumir más agua.