El portaaviones USS Carl Vinson a tan solo 300 kilómetros de las costas de Irán
Más de 8 mil agentes de la aviación estadounidense llegaron a bases de Israel para integrarse a la gran maniobra militar conjunta.

El vocero del Pentágono, John Kirby, informó que el portaaviones USS Carl Vinson reemplazará al USS John C. Stennis, aunque no se refirió a la negativa de varios aliados como Japón y Polonia a tomar parte en un escenario de guerra contra Irán, ni especificó la fecha en que regresará a Estados Unidos el Stennis.

De acuerdo con la agencia iraní Fars, ambos portaaviones se reunirán en Bahrein, sede principal de la Quinta Flota, ubicada a no más de 300 kilómetros de las costas de Irán y que dispone de los misiles de mediano y largo alcance Qader, Nour y Sajjil-2 para la defensa del territorio iraní.

Además, unos 15 mil efectivos conforman los distintos Destacamentos de Fuerza de la Quinta Flota que incluyen cinco portaaviones nucleares, varios destructores y submarinos, así como decenas de aviones de combate y de transporte.

El mandatario venezolano recibirá este fin de semana a su par de Irán, y al presidente de Perú, Ollanta Humala.

Venezuela se prepara para recibir al presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, quién tiene previsto llegar este 8 de enero al país sudamericano acompañado de una delegación de alto nivel, en plena escalada de la tensión con las potencias occidentales.

Ahmadinejad "ha anunciado su visita aún cuando sabemos que lamentablemente las tensiones en el Golfo Pérsico han venido creciendo en las últimas horas por las presiones 'yanquis'", explicó Chávez, puntualizando que el dirigente iraní llegará a Venezuela el "domingo en la noche".

El presidente iraní tenía previsto visitar Caracas en septiembre pasado, pero el viaje fue suspendido a la espera de la "plena recuperación" de Chávez, a quien en junio se le diagnosticó un cáncer.

Ambos países fortalecieron en los últimos años su cooperación, especialmente económica, una relación que inquieta a Estados Unidos.

La gira del líder iraní seguirá en Nicaragua, donde el martes asistirá a la toma de posesión del sandinista Daniel Ortega, reelegido como presidente, Cuba y finalmente Ecuador.

El viaje a estos países, que también mantienen tensas relaciones con Estados Unidos, se produce en plena crisis entre Irán y las potencias occidentales.

Irán advirtió de nuevo este miércoles a Washington contra la presencia de su fuerza naval en el Golfo, después de que un portaaviones estadounidense que se encontraba en la zona cruzara el Estrecho de Ormuz para ir al Mar de Omán, coincidiendo con unas maniobras navales iraníes en la zona.

El sábado, Washington reforzó sus sanciones contra el sector financiero iraní y este miércoles, los gobiernos de la Unión Europea (UE) alcanzaron "un acuerdo de principio" para prohibir las importaciones de petróleo desde Irán, según diplomáticos.

Estados Unidos y la UE buscan imponer nuevas sanciones para obligar a Irán a ceder en su controvertido programa nuclear. Según los occidentales, el objetivo de ese programa es la bomba atómica, cosa que Teherán desmiente de forma categórica.

El presidente de ese país declaró que las sanciones que puedan imponerle por su desarrollo nuclear, no tienen sentido y no tendrán efecto en su plan de gobierno.

El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, afirmó que las sanciones de Occidente al programa nuclear que desarrolla su gobierno no tendrán efectos para su país. "Ciertamente que esas sanciones marcarán un nuevo nivel de progreso en nuestra economía", declaró Ahmadinejad en Nueva York a la cadena de televisión ABC News.

"Hemos enfrentado sanciones e hicimos que ellas se convirtieran en oportunidades para nosotros" agregó el líder iraní. Preguntado sobre los efectos que esas sanciones tienen en la economía iraní, respondió: "Le puedo decir que ninguno".

Irán enfrenta seis resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, cuatro de ellas acompañadas de sanciones, por su programa nuclear y su negativa a renunciar al enriquecimiento de uranio lanzado en 2005.

Irán alega que necesita enriquecer uranio para alimentar con combustible sus futuras centrales y cuenta con producir un día 20.000 megavatios de electricidad de origen nuclear.

Los occidentales sospechan que Irán quiere dotarse del arma atómica escudándose en su programa nuclear civil, pese a sus reiterados desmentidos.

Irán podría fabricar un misil capaz de alcanzar a Estados Unidos en 2015, estimó este martes un alto responsable del Pentágono.

Interrogado en el marco de una audiencia parlamentaria sobre la capacidad de Teherán de alcanzar a Estados Unidos con un misil balístico intercontinental (ICBM por sus siglas en inglés), un secretario adjunto de Defensa, James Miller, contestó: "Podría potencialmente ocurrir desde 2015". Sin embargo, "requeriría una ayuda extranjera", añadió.

Washington sigue atentamente la evolución del programa iraní de misiles, pues acusa a Teherán de querer dotarse del arma atómica bajo cubierto de actividades civiles, lo que Irán desmiente.

Miller también afirmó que lo más probable era que Irán no pudiera fabricar el arma atómica antes de "tres años o más", confirmando lo que había dicho poco antes un militar estadounidense de alto rango.

Paralelamente, Turquía está "dispuesta a actuar como intermediario" para ayudar a solucionar la cuestión nuclear iraní, declaró este martes el ministro turco de Relaciones Exteriores Ahmet Davutoglu en una conferencia de prensa en Teherán.

"Turquía está dispuesta a servir de intermediario para un canje de uranio" entre Irán y las grandes potencias "y esperamos jugar un papel útil en ese caso", declaró Davutoglu luego de un encuentro con su homólogo iraní Manucher Mottaki.

Por otra parte, el jefe de la diplomacia turca reafirmó que para Ankara "la solución (de la cuestión nuclear iraní) pasa por la negociación y por el proceso diplomático" mas que por sanciones, previstas por las grandes potencias.