Todo sobre la masacre en mezquita en Nueva Zelanda

Autoridades de Nueva Zelanda temen que unas 300 ballenas muertas exploten debido a los gases que tienen los cetáceos en su interior

Las autoridades neozelandesas expresaron su temor de que los cadáveres de unas 300 ballenas piloto que quedaron varadas en la Isla Sur del país exploten debido a los gases que tienen los cetáceos en su interior.

Un grupo de personas trabajan en la bahía Golden, donde llegaron el pasado jueves parte de los animales, haciendo agujeros en los restos sin vida de los mamíferos marinos que sirvan como válvula de escape y evite la explosión de las vísceras, señaló el portavoz del Ministerio de Conservación de Nueva Zelanda, Andrew Lamason,

Voluntaria lleva una ballena a un arroyo cercano para descansar mientras se decide cómo se intentarán liberar en masa en Strand Bay en el extremo norte de Nueva Zelanda.

Los cadáveres "se hinchan, hay un montón de bacterias en sus estómagos, y el intestino realmente sale disparado desde el animal", comentó Lamason en declaraciones a Radio New Zealand.

Hasta cerca de 700 ballenas piloto, que pueden medir hasta 6 metros de longitud y pesar más de tres toneladas, han quedado varadas en la región.

Esta se considera una de las mayores concentraciones registradas en Nueva Zelanda, de las que cerca de 400 ballenas han sido devueltas al mar y unos tres centenares han muerto.

Desde que se detectó al primer grupo de ballenas varadas, cientos de personas se acercaron a la zona arenosa conocida como Farewell Spit, en el noreste de la Isla Sur, para intentar reflotar a los animales a pesar de las bajas temperaturas y la presencia de tiburones y rayas que merodeaban los restos.

Ayer, los voluntarios y trabajadores lograron salvar a unas 200 ballenas piloto que forman parte de otro grupo que se quedó varado en la zona el sábado por la noche.

Se desconoce las razones por las cuales estas ballenas se han quedado varadas, aunque la bahía de Golden, que tiene aguas poco profundas, es conocida por este tipo de incidentes.

En febrero de 2015 se organizó un operativo para intentar salvar a 200 ballenas piloto que se quedaron atrapadas en la misma zona de Farewell Spit, pero este no impidió que la mayoría pereciera en el lugar.

En terremoto de magnitud 7.1 acaba de sacudir la costa de Gisborne, en Nueva Zelanda, informó el Instituto Geológico de Estados Unidos.


Un terremoto de magnitud 7,2 ha sacudido la Isla Norte de Nueva Zelanda la madrugada de este viernes (hora local), informó el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS por sus siglas en Inglés).

El reporte apunta a que el epicentro se ha situado 145 kilómetros (km) al Norte-noreste de Gisborne, a una profundidad de 159 kilómetros.

De acuerdo con el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC por sus siglas en Inglés), no hay posibilidades de que se genere un maremoto, producto de la gran profundidad a la que ha ocurrido el sismo.

Según el Sistema Mundial de Alerta y Coordinación de Desastres (GDACS, por sus siglas en Inglés), unas 4000 personas viven en un radio de 100 kilómetros del epicentro del terremoto.

Los reportes de percepción al USGS apuntan a que el movimiento se ha percibido con una intensidad de hasta IV en la escala sismológica de Mercalli modificada, que se basa en la percepción de la población y los efectos en el terreno y estructuras tras un sismo.

El GDACS declaró en un boletín que hay bajas probabilidades de que el terremoto genere un impacto humanitario importante, basado en la profundidad del sismo y la cantidad de gente que vive cerca del epicentro, así como su vulnerabilidad.

Por su posición en el Cinturón de Fuego del Pacífico, Nueva Zelanda es azotada constantemente por fuertes terremotos. El último de ellos más mortífero ocurrió el 22 de febrero de 2011, en Christchurch. Tuvo una magnitud de 6,3 pero causó 181 fallecimientos.