Celia Cruz Nueve años desde que se apagó su voz
Cruz, considerada como la auténtica reina de la salsa, falleció un 16 de julio hace nueve años en su residencia de la localidad de Fort Lee (Nueva Jersey), en compañía de su esposo, Pedro Knightm, y otros seres queridos.
La "Guarachera de Cuba", otro de los apelativos que se ganó Cruz en vida, había sido operada unos meses antes de un tumor en la cabeza y sufrió varias recaídas semanas antes de que se voz se apagara para siempre en su casa, a los 78 años.
Cruz, detrás de éxitos como "La vida es un carnaval" y conocida en el mundo entero por su expresión "¡Azúcar!", había iniciado su carrera artística cuando un primo la animó a participar en "La hora del té", un concurso radiofónico en el que ganó la final.
Tras unos principios en salas de fiesta de segunda categoría, tuvo su gran oportunidad cuando Mirta Silva, solista del grupo musical "La Sonora Matancera", abandonó la formación y Celia se presentó a las pruebas, en las que salió seleccionada.
En julio de 1960, Celia y "La Sonora Matancera" lograron salir de Cuba para actuar en México y decidieron no regresar al país por sus divergencias con el régimen castrista, un exilio que vivió el resto de su vida y que le hizo nacionalizarse estadounidense.
La reina de la salsa, con cinco Grammy, cantó junto a las grandes voces de la música caribeña, desde Johnny Pacheco, Tito Gómez, Héctor Lavoe, Oscar D'León o Willie Colón, hasta Canelita Medina, Olga Guillot o Rita Montaner, entre otros.
A lo largo de su prolífica carrera, Cruz, que llegó a tener su propia estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, también tuvo tiempo para la actuación, con su aparición en una decena de películas y un par de telenovelas.