Alejandro Toledo, El expresidente peruano fue arrestado en Estados Unidos en el marco de una investigación sobre sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, pero su extradición podría demorar un año, dijo el martes el ministro de Justicia de Perú.

Toledo, de 73 años y que gobernó entre 2001 y 2006, está prófugo de la justicia peruana por presuntamente recibir al menos 20 millones de dólares de Odebrecht a cambio de ayuda para ganar obras públicas en el país sudamericano.

El exmandatario ha negado frecuentemente las acusaciones y dice que es un perseguido político.

Vicente Zeballos, ministro de Justicia y legislador oficialista, dijo que Toledo enfrentará el viernes una primera audiencia ante un juez que definirá si el exmandatario enfrenta el proceso de extradición en libertad o continúa detenido.

Posteriormente, habrá otra audiencia de fianza antes del proceso de extradición y posiblemente un último recurso legal que presentaría Toledo, agregó el funcionario.

“En número redondos (la extradición) podría tardarse un año”, dijo Zeballos a periodista tras una presentación en el Congreso. “El Gobierno está comprometido en una lucha frontal contra la corrupción”, agregó el ministro.

Más temprano, la Unidad de Cooperación Judicial Internacional del Ministerio Público informó en un mensaje en Twitter que el exmandatario se encontraba en una “comparecencia ante las autoridades judiciales norteamericanas, como parte del proceso orientado a lograr su retorno al país”.

El ministerio de Relaciones Exteriores dijo que Toledo fue detenido en California, sin ofrecer más detalles.

SITUACIÓN COMPLICADA
Toledo fue detenido por unas horas en marzo pasado por estar ebrio y protagonizar un escándalo en un restaurante del condado de San Mateo, California, según la policía.

El Gobierno del presidente Martín Vizcarra pidió hace un año a Estados Unidos formalmente su extradición. Toledo tiene además una orden de prisión preventiva por 18 meses desde febrero del 2017, solicitada por el fiscal que lo investiga.

El abogado en Lima del expresidente Toledo afirmó en tanto que su cliente no ha tenido el debido proceso. “La injerencia e interferencia (política) en el caso Toledo está probada y eso ya está en la carpeta” de investigación, dijo Heriberto Benítez.

La situación del político se complicó en marzo, luego de que el empresario peruano israelí Josef Maiman, quien fue un cercano colaborador de Toledo, confesó ante fiscales tras un acuerdo que Odebrecht otorgó al expresidente hasta unos 35 millones de dólares en sobornos.

Perú ha sufrido una ola de escándalos políticos por el caso Odebrecht, que ha terminado con el expresidente Pedro Pablo Kuczynski detenido en su domicilio mientras lo investigan.El exmandatario Alan García se suicidó en abril cuando iba a ser arrestado en el marco de otras pesquisas.

El expresidente Ollanta Humala está esperando en libertad restringida un juicio por un financiamiento electoral no declarado de la firma brasileña; mientras que la líder opositora Keiko Fujimori está prisión mientras se le investiga por lavado de activos.

Reporte de Marco Aquino y María Cervantes; Editado por Javier López de Lérida

Una comisión legislativa de Perú que investiga casos de corrupción interrogaba el viernes al presidente Pedro Pablo Kuczynski, cuya situación parece complicarse tras la difusión de nuevos documentos de transferencias de dinero de la empresa brasileña Odebrecht a consultoras vinculadas al mandatario.

Según los documentos de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la reguladora de bancos, vistos por Reuters, Kuczynski recibió transferencias por 3,4 millones de dólares de parte de dos firmas consultoras vinculadas a él y que habían recibido dinero de empresas y de consorcios vinculados a Odebrecht.

Las transferencias se realizaron en los últimos 13 años.

Kuczynski, quien ha negado que sus lazos con Odebrecht reflejen algún acto ilegal, fue ministro de Economía y primer ministro entre 2004 y 2006 durante el Gobierno del exmandatario Alejandro Toledo, quien es investigado por presuntamente haber recibido sobornos de la firma brasileña.

La presidenta de la comisión, la legisladora opositora Rosa Bartra dijo antes de ingresar al Palacio de Gobierno para su encuentro con Kuczynski, que “son documentos que vamos a investigar” y agregó que podrían en adelante ser utilizados por su grupo de trabajo.

Los documentos de la UIF también señalan transferencias entre 2005 y 2016 por unos 602.000 dólares de Kuczynski a quien fue su chofer oficial cuando era primer ministro en 2006 y cuando asumió la presidencia en 2016.

La Presidencia de la República afirmó al respecto en un comunicado que las transferencias corresponden al pago de remuneraciones, mantenimiento de vehículos, medicinas y pagos de servicios públicos que realizó el chofer a nombre de Kuczynski.

La primera ministra, Mercedes Aráoz, fustigó la difusión de “documentos reservados” que son materia de investigación y dijo que lo que se busca es justificar el pedido de destituir a Kuczynski, que será debatido el jueves en el Congreso.

El Gobierno ha acusado a grupos de izquierda de promover la vacancia de Kuczynski porque no le perdonan haber indultado al expresidente Alberto Fujimori, quien cumplía prisión por abusos a los derechos humanos y corrupción.

Lima,Perú.-Miles de personas marcharon en Lima y provincias, en rechazo a los casos de corrupción que envuelven a la constructora brasileña Odebrecht, que admitió el pago de millonarios sobornos a cambio de obras en Perú, durante al menos tres gobiernos.

La movilización, convocada por la Confederación General de Trabajadores del Perú, se inició en Lima en la tradicional plaza Dos de Mayo y culminó en frente del Palacio de Justicia. También hubo multitudinarias manifestaciones en otras ciudades del país.

La movilización, convocada por la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP) se inició en la tradicional plaza Dos de Mayo, concentración de los trabajadores, y de ahí enrumbó al Palacio de Justicia.

Las arengas decían: "¡Este es el pueblo, valiente y combativo!" y llevando carteles con mensajes como: "¡No a la corrupción!".

“No podemos permitir que un grupo de funcionarios y presidentes nos robe", dijo a la prensa Jorge Bracamonte, de la Coordinadora Contra la Corrupción, participante de la movilización. "Tenemos que desterrar a esa banda criminal que nos ha estado robando los bolsillos", agregó.

Odebrecht, que reconoció el pago de coimas en Brasil y Latinoamérica a cambio de obras públicas en el caso conocido como "Lava Jato", admitió que pagó 29 millones de dólares en Perú ilegalmente entre 2005-2014, durante los gobiernos de Alejandro Toledo, Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016).

Toledo es buscado por la justicia, acusado de recibir 20 millones de dólares de Odebrecht a cambio de entregarles la construcción de una carretera. El ex gobernante se encontraría en Estados Unidos y Perú tramita su extradición.

Un manifestante disfrazado de rata con una banda presidencial encabezaba uno de los pelotones, seguido de pancartas que pedían "muerte a los corruptos", o mensajes como "Barata, devuelve la plata", en alusión a Jorge Barata, ex representante de Odebrecht en Perú, quien admitió el pago de sobornos.

Hasta ahora hay tres ex funcionarios del gobierno de Alan García en prisión por supuestamente aceptar un soborno de 7 millones de dólares a cambio de favorecer a Odebrecht con la obra de la Línea 1 del Metro de Lima.

En otras ciudades como Chimbote (400 km al norte de Lima), las manifestaciones también fueron multitudinarias.

Según un reporte de radio RPP, los manifestantes fueron dispersados con gases lacrimógenos cuando intentaron llegar a la plaza principal de esa localidad.

Colectivos civiles, gremios sindicales y el movimiento Nuevo Perú  que lidera la ex candidata presidencial del izquierdista Frente Amplio, Verónica Mendoza se sumaron a la protesta.

Humala y su esposa Nadine Heredia, quienes cuentan con restricciones para salir del país, están siendo investigados por lavado de activos por financiar presuntamente su campaña electoral con dinero procedente de Venezuela y de Brasil.

Según documentos de la Policía Federal de Brasil, Odebrecht entregó 3 millones de dólares para la campaña de Humala.