El Cairo, 23 diciembre EFE- Al menos 1.171 personas han muerto en Siria en los bombardeos de la coalición internacional, encabezada por Estados Unidos, contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), que comenzaron el pasado 23 de septiembre, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

El observatorio detalló que 1.046 fallecidos son combatientes del EI, la mayoría de ellos extranjeros, que han perdido la vida por los bombardeos de la aviación internacional y por el lanzamiento de cohetes en zonas como Homs (centro), Hama (centro), Alepo (norte), Deir al Zur, Al Hasaka y Al Raqa (noreste).

Entre los fallecidos hay al menos 52 civiles, entre ellos ocho menores de edad y cinco mujeres, en ataques en las provincias de Al Hasaka, Deir al Zur, Al Raqa, Alepo e Idleb.

Además, al menos un insurgente de una brigada islamista, que era prisionero del EI, perdió la vida en un bombardeo aéreo contra un cuartel de la organización radical en la población de Madan, situada en Al Raqa.

La ONG, que mantiene una amplia red de activistas sobre el terreno, explicó que los bombardeos aéreos han afectado también a refinerías y yacimientos de crudo, molinos y una fábrica.

Las operaciones de la coalición han tenido como objetivos, además, cuarteles y sedes del Frente al Nusra, que es la filial de la organización terrorista Al Qaeda en Siria. En total, 72 de sus hombres murieron en Alepo e Idleb, entre el 23 de septiembre y ayer.

Según EEUU, se han atacado objetivos de la organización Jorasán, vinculada al Frente al Nusra, y que supuestamente estaba conspirando para lanzar ataques en Occidente.

El Observatorio no excluyó la posibilidad de que el número total de víctimas mortales pueda ser superior, debido al secretismo que mantienen los extremistas sobre sus bajas mortales y a que hay zonas en las que resulta difícil entrar para verificar los muertos.

El EI proclamó un califato en Siria e Irak a finales de junio, donde ha conquistado amplias zonas.

Según la ONU, más de 200.000 personas han muerto en Siria desde el inicio del conflicto.

Al menos 19 soldados y personal auxiliar del ejército sirio murieron en un ataque con coche bomba perpetrado por el grupo Estado Islámico (EI) en el enclave gubernamental de la ciudad de Deir Ezzor, en el este de Siria, informó este jueves una ONG.

El atentado se produjo en la noche del miércoles en una posición gubernamental cerca del aeropuerto militar de la ciudad, un punto vital para el abastecimiento de las tropas, que están bajo asedio, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

Los combates permitieron a los yihadistas apoderarse de algunas posiciones gubernamentales, dos tanques, un vehículo blindado, piezas de artillería y armas automáticas, según esa ONG. Perdieron siete combatientes.

El EI controla la mayoría de la rica provincia de Deir Ezzor pero la mitad de la ciudad está en manos de las fuerzas gubernamentales, así como el aeropuerto militar.

El presidente sirio, Bashar al Asad, afirmó que los ataques aéreos occidentales contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) no han logrado ningún avance sobre el terreno, al tiempo que aseguró que no tiene previsto abandonar la presidencia de su país.

“No se puede acabar con el terrorismo con bombardeos aéreos. Son indispensables fuerzas terrestres que conozcan la geografía y actúen al mismo tiempo. Por eso no ha habido avances reales tras dos meses de campaña de la coalición” internacional, indicó Al Asad en una entrevista con la revista francesa “Paris Match” de la que hoy se publicaron extractos.

La difusión de la entrevista -realizada el pasado sábado en Damasco- se produce el mismo día en que los países que forman la coalición aseguraran en Bruselas que su campaña contra EI “empieza a mostrar resultados” y a “detener” el avance de ese grupo yihadista en Irak y Siria.

El presidente sirio afirmó que “no es verdad” que los bombardeos occidentales estén contribuyendo a su lucha contra el terrorismo, en la que él engloba al EI y a la rebelión en su país.

“Nos habrían ayudado si hubieran sido importantes y eficaces. Somos nosotros quienes dirigimos los combates terrestres contra el EI y no hemos constatado ningún cambio, sobre todo a causa de que Turquía sigue aportando ayuda directa en esas regiones”, agregó.

Al Asad indicó que no tiene previsto abandonar la presidencia de Siria y afirmó que su pueblo “no aceptará nunca que el país se convierta en un juguete en manos de Occidente”.

El presidente sirio envió un dardo envenenado a su homólogo francés, François Hollande, de quien dijo que su cota de popularidad es próxima a la del EI.

“Ni siquiera lo conozco (a Hollande), pero no se trata de relaciones personales sino de relaciones entre Estados e instituciones en interés de ambos pueblos”, dijo.

Al Asad acusó a la administración francesa de actuar contra los intereses del pueblo sirio y del francés.

“No soy enemigo personal ni rival de Hollande. Creo que más bien es el EI el que es su rival, porque sus cotas de popularidad están muy cercanas”, afirmó.

El ejército libanés detuvo a una de las esposas y a un hijo del jefe del grupo Estado Islámico, Abu Bakr al Bagdadi, cerca de la frontera con Siria hace diez días, afirmó el martes una fuente de los servicios de seguridad.

“Una de las mujeres de Bagdadi se halla detenida con su hijo en el centro de los servicios de inteligencia militar en Yarzé (cerca de Beirut) tras haber sido arrestada con un carné de identidad falso. Va a ser interrogada”, declaró esta fuente.

“Los servicios de inteligencia militar detuvieron a una de sus mujeres, cuando viajaba con su hijo, de 8 u 9 años, cerca (de la ciudad fronteriza sunita) de Arsal hace diez días”, agregó.

BEIRUT, Líbano.-La cifra de muertos provocados por los ataques de la fuerza aérea siria al baluarte del grupo Estado Islámico en el noreste de Siria se ha elevado a por lo menos 95, en uno de los peores ataques a la ciudad de Raqqa en los últimos tres años, dijeron activistas el miércoles.

Algunos de los ataques del martes alcanzaron un mercado cerca de un museo y una zona industrial, provocando numerosas muertes los civiles.

El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, elevó la cifra de víctimas a 95. Su director, Rami Abdurrahman, dijo que el grupo pudo identificar a 52 civiles entre los muertos, incluidos tres mujeres y cuatro niños. Los heridos suman al menos 120, según el Observatorio.

Otros grupos de activistas como los Comités Locales de Coordinación y el grupo Raqqa Es Masacrada en Silencio, calculan que los muertos superan el centenar entre milicianos y civiles.

La Associated Press no pudo confirmar independientemente la cifra de muertes, una de las más elevadas en un solo día en la ciudad, que está bajo el control total del grupo Estado Islámico.

El gobierno sirio y la coalición liderada por Estados Unidos bombardean frecuentemente blancos del EI en Raqqa, pero no estaba claro de inmediato qué motivó los intensos ataques del martes. El grupo EI ha dado muerte a cientos de soldados sirios en los últimos meses y recientemente difundió un video en el que alega mostrar la decapitación de una decena de soldados sirios, entre ellos varios oficiales.

En Irak, fuerzas de seguridad apoyadas por milicianos de tribus suníes rechazaron un ataque del EI a instalaciones del gobierno en el centro de Ramadi, la capital de la provincia occidental de Anbar, según fuentes oficiales que hablaron a condición de no ser identificadas.

© 2014, La Prensa Asociada.

El grupo radical ISIS (Estado Islámico) obliga a sus prisioneros a donar sangre, como condición para ser liberados, con el fin de tratar a sus heridos en la provincia de Deir al Zur, en el noreste de Siria, informó este lunes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La ONG, que cita a activistas en la zona, precisó que los extremistas alegan que los prisioneros deben donar sangre para "tratar a los hermanos muyahidines (guerreros santos), que defienden los frentes de batalla de los enemigos de Alá".

Según el Observatorio, la sangre es transportada a los hospitales de campaña del ISIS en la ciudad de Deir al Zur y en su periferia oriental y occidental. La organización pro derechos humanos destacó que el número de heridos entre los yihadistas aumentó por los bombardeos de la coalición internacional, liderada por EEUU, y de la aviación militar del régimen de Bashar al Asad, así como por los choques contra los efectivos gubernamentales en Deir al Zur.

El Observatorio señaló que al menos 40 miembros yihadistas perecieron entre ayer y hoy en combates y ataque aéreos en el enclave kurdo sirio de Kobane y en Deir al Zur. A estos muertos se suman diez yihadistas que perecieron el domingo por un bombardeo de la coalición internacional contra Al Raqa, bastión principal de ISIS en Siria.

El grupo extremista proclamó a finales de junio un califato en Siria e Irak, países donde ya domina zonas del norte y el centro. El pasado día 13, ISIS emitió una grabación atribuida a su líder, Abu Bakr al Bagdadi, en la que anunció la expansión del califato a los países del golfo Pérsico y el norte de África, donde otras organizaciones radicales le han jurado lealtad.

Los ataques aéreos de las fuerzas estadounidenses en Siria han causado la muerte de 521 combatientes islamistas y 32 civiles en un mes de la campaña, dijo el jueves un grupo de derechos humanos que observa la violencia en la zona.

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos con sede en Londres dijo que la mayoría de las muertes, 464, eran militantes del Estado Islámico, una rama de al Qaeda que ha ocupado grandes regiones de Siria y su vecina Irak.

Los ataques también causaron la muerte de 57 miembros de otra filial de al Qaeda Nusra Front, dijo el Observatorio. Seis de los civiles eran niños y cinco mujeres, añadió.

Estados Unidos ha estado llevando a cabo ataques aéreos en Irak contra el Estado Islámico desde julio y en Siria desde septiembre con la ayuda de los aliados árabes. Reino Unido y Francia también han disparado a objetivos del Estado Islámico en Irak.

Washington justificó sus acciones en Siria con el artículo 51 de los estatutos de las Naciones Unidas, el cual cubre el derecho individual o colectivo de defensa propia contra un ataque armado.

El portavoz del Centro de Comando estadounidense, coronel Patrick Ryder, dijo el sábado que Washington "asume con seriedad los informes que reportan víctimas civiles o daños a instalaciones civiles y llevamos un proceso para investigar cada denuncia".

Cerca de 200.000 personas han muerto en la guerra civil de tres años en Siria, según la ONU.

Los ataques de la coalición han golpeado las provincias sirias de Aleppo, Deir al-Zor, Idlib, Raqqa y al-Hassakah, dijo el Observatorio.

El papa Francisco arremetió este jueves contra los yihadistas de Irak y Siria por "la persecución cotidiana" que sufren "cientos de miles de hombres, mujeres y niños inocentes" en esos dos países.

El papa Francisco arremetió este jueves contra los yihadistas de Irak y Siria, afirmando sin nombrarlos que ninguna razón "religiosa, política o económica" puede justificar "la persecución cotidiana" que sufren "cientos de miles de hombres, mujeres y niños inocentes" en esos dos países.

Según un comunicado de la Santa Sede, el sumo pontífice asistió a la apertura de una reunión de tres días con embajadores del Vaticano en todo Oriente Medio. El objetivo es examinar la situación creada con el empuje del grupo Estado Islámico (EI) y los ataques aéreos de la coalición internacional contra éste.

En una declaración ante Mar Dinkha IV, patriarca de la Iglesia Asiria de Oriente, el santo padre denunció "la persecución cotidiana" que sufren iraquíes y sirios.

"Cuando pensamos en su sufrimiento, hay que ir espontáneamente más allá de las distinciones de ritos y de confesiones. Es el cuerpo de Cristo el que, todavía hoy, es humillado, golpeado, herido. No hay razones religiosas, políticas o económicas que justifiquen lo que le está ocurriendo actualmente a cientos de miles de hombres, mujeres y niños inocentes", declaró el obispo de Roma.
La Iglesia Asiria es una de las más antiguas de Oriente, y está presente tanto en Irak como en Siria. Mar Dinkha IV es oriundo de Erbil, una importante ciudad del Kurdistán iraquí.

Ante la Asamblea General de la ONU, la semana pasada, el número dos del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, afirmó que es "lícito y urgente" parar a los yihadistas en Irak. Y añadió que toda intervención debe hacerse bajo la égida del Consejo de Seguridad y con el beneplácito del Estado en cuestión.

En 2013, la Santa Sede se opuso a una intervención exterior contra el régimen sirio de Bashar al Asad, acusado en ese momento de emplear armas químicas contra la población civil cerca de Damasco.

Sin embargo, en el caso del EI ha adoptado una actitud más favorable a una intervención armada.

Varios obispos de Oriente Medio, no obstante, critican lo que consideran como una respuesta muy tibia del Vaticano a la amenaza yihadista.

El mes pasado, el arzobispo caldeo de Alepo, Antoine Audo, manifestó a la AFP su decepción por la reacción del Vaticano.

Según él, el papa es "una autoridad moral incluso para el mundo musulmán". "Francamente, con todo lo que ha pasado en Irak, en Mosul [ciudad bajo control yihadista], estamos un poco desanimados, no vemos muchos resultados ni eficacia en todas estas declaraciones".

Dos coches bomba explotaron cerca de una escuela en un céntrico vecindario de la ciudad de Homs, en Siria, matando a más de 20 personas e hiriendo a muchas más, en su mayoría niños.

Las bombas estallaron cuando los niños salían de sus clases.

Videos aparentemente filmados con teléfonos en la escena muestran a los menores llorando y gritando, mientras los adultos corren con los muertos y heridos en brazos.

El distrito donde ocurrieron las explosiones es mayormente alauita, es decir de la rama del Islam a la que pertenece el presidente, Bashar al Asad.

Este año, el gobierno sirio retomó el control de casi todo Homs, en virtud de un acuerdo que supuso el retiro de militantes rebeldes.

Según testigos citados por la organización internacional, al menos siete personas, entre ellas cinco niños, murieron en un ataque lanzado el pasado martes contra una aldea en el norte del país.

Los ataques aéreos liderados por Estados Unidos contra posiciones yihadistas en Siria también están causando la muerte de civiles, aseguró hoy la organización defensora de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW).

Según testigos citados por HRW, al menos siete personas, entre ellas cinco niños, murieron en un ataque estadounidense lanzado el pasado martes contra una aldea en el norte de Siria.

El ataque, que iba dirigido contra posiciones de la milicia Frente al Nusra, cerca de la ciudad de Idlib, alcanzó también dos casas en una aldea situada a una distancia de un kilómetro de una base islamista, según HRW.

La Fuerza Aérea de Estados Unidos comenzó el pasado martes a realizar junto con sus aliados árabes ataques en Siria. Anteriormente estaban en el centro de los ataques bases de la milicia terrorista Estado Islámico (EI) en Irak.

El Frente al Nusra, un grupo vinculado a la red terrorista Al Qaeda, anunció en un mensaje de audio difundido en la noche del sábado en Internet ataques contra los países aliados de Estados Unidos.

El Ejército libanés ha detenido en las últimas dos semanas a centenares de ciudadanos sirios, entre ellos presuntos islamistas, cerca de la frontera con el país vecino, informaron hoy a Efe fuentes militares."Cada día detenemos a centenares de sirios, muchos de ellos presuntamente yihadistas, pero otros son personas que han entrado ilegalmente en el país", agregó la fuente, que precisó que los detenidos "podrían alcanzar los 500 en las dos últimas semanas".

La fuente explicó que "el Líbano está saturado con la presencia de dos millones de sirios en su territorio a pesar de que todos los pasos fronterizos están cerrados".

En un comunicado, el Ejército anunció hoy que acabó con la vida de un refugiado sirio e hirió a otros dos que consideró "sospechosos", ya que trataban de incendiar desde una moto varias tiendas de campaña durante la inspección de los militares en un campo de refugiados en la región de Arsal, limítrofe con Siria.

La agencia oficial ANN afirmó de que cuatro presuntos miembros del Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, también fueron detenidos.

También informó de que los refugiados sirios izaron la bandera del grupo yihadista Estado Islámico (EI) frente a la sede de la municipalidad de la localidad de Arsal, en signo de protesta por las redadas que el Ejército hizo esta mañana en sus campos.

Las fuerzas de seguridad libanesa tratan de impedir que la región de Arsal, limítrofe con Siria, se transforme en una base de los yihadistas del EI, del Frente al Nusra y de otros grupos extremistas que combatieron con las Fuerzas Armadas en agosto pasado en esa parte del Líbano.

En otro comunicado, el Ejército aseguró haber detenido hoy a 20 "sospechosos" en sus casas en la región de Trípoli, donde los efectivos se incautaron de armas y de material militar.

Por su parte, el fiscal militar Sakr Sakr emitió hoy un acta de acusación contra tres detenidos por pertenencia a organizaciones terroristas, por su implicación en los combates en Arsal y posesión de armas y bombas.

Los detenidos, que fueron transferidos al juez de instrucción militar Riad Abu Ghida, podrían ser condenados a la pena de muerte si se les reconoce culpables.

Desde el estallido del conflicto en la vecina Siria, en marzo de 2011, han aumentado los atentados, secuestros, enfrentamientos armados y otros actos violentos en el Líbano, país dividido entre partidarios y detractores del presidente sirio, Bachar al Asad.

Estados Unidos anunció este miércoles haber realizado cinco nuevos ataques en Irak y Siria, durante los cuales destruyeron varios vehículos pertenecientes al grupo Estado Islámico (EI), posiciones de combate y un escondite de armas.

El comando estadounidense encargado de Medio Oriente y Asia Central (Centcom) precisó que dos ataques aéreos fueron llevados a cabo al oeste de Bagdad, otros dos al sudeste de la ciudad de Erbil y un quinto golpe se registró en el noroeste de Siria.

El Ministerio de Asuntos Exteriores emiratí confirmó hoy la participación de sus fuerzas aéreas en los primeros bombardeos de la coalición internacional liderada por EEUU contra posiciones del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria.

En un comunicado publicado por la agencia oficial de noticias de los Emiratos Árabes Unidos, WAM, el ministerio aseguró que "la operación se llevó a cabo en coordinación con otras fuerzas que participaron en los esfuerzos internacionales contra el Estados Islamico".

Jordania y Baréin también confirmaron hoy su participación en los bombardeos anunciados ayer por Estados Unidos.

En un comunicado difundido por la agencia oficial jordana, Petra, una fuente de la Jefatura General del Ejército apuntó que la aviación jordana destruyó "varios objetivos" de los extremistas.

Por otro lado, una fuente militar citada por la agencia bareiní de noticias, BNA, añadió que los bombardeos de Baréin estuvieron acompañados por otros de las fuerzas aéreas de países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) y de fuerzas aliadas y amigas.

El CCG está integrado por Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Baréin, Omán, Kuwait y Catar.

El portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, el contraalmirante John Kirby, anunció que su país y "naciones aliadas" habían iniciado la ofensiva de ataques aéreos contra el grupo yihadista EI, con una combinación de cazas, bombarderos y misiles Tomahawk.

Fuentes oficiales citadas por los diarios estadounidenses "The Washington Post" y "The New York Times" precisaron que en la operación participan cinco países árabes: Baréin, Jordania, Catar, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos.

Nueva York,El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, llamó a tomar todas las precauciones necesarias para evitar víctimas civiles y coincide en que los yihadistas representan una amenaza a la seguridad internacional.

El diplomático surcoreano recordó que, pese a que los ataques no han sido autorizados por el Gobierno sirio, este fue informado de antemano y las acciones se han producido en zonas que no estaban bajo su control.

Ban recordó que la ONU considera fundamental la protección de los civiles y defendió que en Siria esto requiere una "acción inmediata", siempre que esta se base en los principios de las Naciones Unidas.

Según subrayó, en Siria los civiles no pueden contar con verdadera protección "si se permite que grupos extremistas actúen con impunidad y si el Gobierno sirio continúa cometiendo graves violaciones de los derechos humanos contra sus propios ciudadanos".

Al mismo tiempo, urgió a los países participantes en la campaña contra el Estados Islamico a "cumplir con la ley humanitaria internacional y a tomar todas las precauciones para evitar y minimizar las bajas civiles".

En ese sentido, lamentó "toda perdida de vida civil como resultado de los ataques contra objetivos en Siria".
MisterDj1.net | EFE | Foto: Archivo

Las grandes posibilidades de que ocurra un peligro enfrentando la coalición internacional contra Estado Islámico.

Como se va a lograr que países con diferentes estrategias, políticas e intereses se unan bajo el liderazgo de un país que muchos de ellos desconfían es el gran interrogante.

Lo anunciaron con ímpetu: alrededor de 30 países, entre árabes y occidentales, se comprometieron a formar una coalición para combatir al grupo radical autodenominado Estado Islámico (EI), que se asentó en un amplio territorio de Irak y Siria y ha conmocionado al mundo con sus prácticas crueles, que incluyen la difusión de videos de decapitaciones.

La alianza seguirá básicamente las líneas presentadas por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el 10 de septiembre: ataques desde el aire, apoyo a fuerzas locales, el uso de los servicios de inteligencia y contraterrorismo, y provisión de ayuda humanitaria.

La alianza comenzó a funcionar pocos días después de la cumbre en París. Francia fue el primer país en sumarse activamente a los ataques de EE.UU. en Irak, el viernes pasado.

Y este martes dio un golpe estratégico. El Pentágono informó que Estados Unidos y cinco aliados árabes lanzaron (Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Bahrein y Qatar) por primera vez ataques aéreos contra objetivos de EI en Siria. Hasta ahora los bombardeos se habían concentrado en Irak.

Estados Unidos y “naciones aliadas” iniciaron la noche de este lunes la ofensiva de ataques aéreos contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria.

Estados Unidos y “naciones aliadas” iniciaron la noche de este lunes la ofensiva de ataques aéreos contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria, anunciada hace dos semanas por el presidente estadounidense, Barack Obama, informó el Departamento de Defensa del país norteamericano.

“Fuerzas de Estados Unidos y de naciones aliadas han comenzado los ataques contra el EI en Siria usando una combinación de cazas, bombarderos y misiles Tomahawk”, anunció en Twitter el portavoz del Pentágono, el contralmirante John Kirby, según destacó la agencia Efe.

Las autoridades estadounidenses están rastreando estrechamente pistas sobre algunos de los 100 estadounidenses que se estima han luchado con el grupo yihadista Estado Islámico en Medio Oriente y que se cree pueden haber regresado al país, dijo un alto funcionario el lunes, citado por AFP.

Los combatientes estadounidenses del EI bajo vigilancia por parte del FBI “incluye a los que han ido (a Oriente Medio), los que han intentado ir, algunos de los que han regresado y otros que están activos”, declaró a periodistas el funcionario bajo condición de anonimato.

La revelación se produce antes que el presidente Barack Obama viaje a Nueva York el martes para presidir una reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la amenaza planteada por los combatientes occidentales que se han inscrito para luchar por los yihadistas y que podrían representar un riesgo a la seguridad en sus países de origen.

Más temprano, el Gobierno de Australia dijo que cree en la veracidad del mensaje del Estado Islámico (EI) que insta a su seguidores a matar a los ciudadanos de los países de la coalición, incluidos australianos, informan los medios locales.

El portavoz del EI, Abu Mohamed al Adnani, hizo este llamamiento en una grabación divulgada en páginas islamistas, unos días después de un gran operativo en Australia para desmantelar una célula yihadista que buscaba secuestrar y decapitar a civiles en el país.

“Nuestras agencias están abordando esta amenaza como genuina y es bastante aparente que el EI está preparado para atacar a cualquiera que no comparta sus puntos de vista. Así que, es una amenaza, no porque no estemos preparados, sino por lo que es el EI”, subrayó la ministra australiana de Exteriores, Julie Bishop, en Nueva York.

La Policía fronteriza turca lanza gases lacrimógenos y cañones de agua para impedir el éxodo masivo de kurdos a Turquía.
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El domingo pasado el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) anunció que unos 70.000 kurdos de Siria que huían del avance de los yihadistas del Estado Islámico en su país entraron en territorio turco en las últimas 24 horas, lo que también provocó choques con la policía fronteriza turca.

El ACNUR explicó en un comunicado que el Gobierno turco y la organización se preparan para “la posibilidad de que cientos de miles de nuevos refugiados lleguen en los próximos días” a causa de los combates que tienen lugar cerca de la ciudad de Kobani, en el norte de Siria.

La mayoría de los huidos, según el ACNUR, son mujeres, niños y ancianos.

Por otro lado, las autoridades locales levantan un campamento provisional para 10.000 personas en el jardín de un colegio con objeto de acomodar a los refugiados.

Desde hace días los yihadistas lanzan ataques con armamento pesado contra varios pueblos localizados en los alrededores de la ciudad de Kobani, uno de los feudos kurdos del norte de Siria, impactando algunos de los proyectiles en suelo turco.

El Estado Islámico ha publicado un nuevo vídeo en el que un periodista británico capturado promete exponer la “verdad” sobre el grupo yihadista.

En el vídeo, John Cantlie, fotógrafo de guerra y excorresponsal de ‘The Sunday Times’, ‘The Sun’ y ‘The Sunday Telegraph’, habla ante la cámara sentado detrás de una mesa en una habitación oscura.

En esta oportunidad los yihadistas expusieron a un fotoperiodista británico que lee un extenso comunicado de tres minutos en el cual aclara que no fue obligado a decir lo que está pronunciando y que habrá “nuevas emisiones” de este particular “programa” terrorista.

“Hola, mi nombre es John Cantley. Soy un periodista británico que solía trabajar para algunos de los más grandes periódicos y revistas del Reino Unido, incluyendo a The Sunday Times, The Sun y The Sunday Telegraph”, comienza su discurso el rehén.

Cantley es un fotógrafo y corresponsal de guerra que fue secuestrado en julio de 2012 por extremistas islámicos, mientras atravesaba Siria, cerca de la ciudad de Bab Al-Hawa y fue herido de bala mientras intentaba escapar de sus secuestradores. El periodista es uno de los tantos rehenes que mantienen en cautiverio los terroristas del islam, quienes ya ejecutaron a tres occidentales cuyas decapitaciones fueron emitidas por las redes sociales.

Alan Henning era el último rehén británico exhibido por los yihadistas del ISIS y a quien prometen decapitar si continúan los bombardeos occidentales sobre bases estratégicas de los terroristas. Sin embargo, sorprendió a los medios del Reino Unido esta nueva forma de mostrar a sus víctimas y es incierto qué pasará ahora con el taxista.

El extremista Estado Islámico (EI) tomó el control sobre 16 pueblos sirios, fronterizos con Turquía, informó Reuters este jueves citando el Observatorio sirio de los Derechos Humanos.

“El grupo cuenta con numerosos combatientes”, dijo el director de la organización, Rami Abdel Rahman.

El ataque de los yihadistas contra la ciudad de Ain al Arab, en la frontera con Turquía, empezó el pasado miércoles. Militares kurdos informaron de que los terroristas usaron carros de combate y otro material bélico durante la ofensiva.

El EI, conocido antes como Estado Islámico de Irak y el Levante, que anteriormente centró sus operaciones militares en Siria, en junio pasado atacó los territorios del norte y el oeste de Irak, donde se le unieron extremistas suníes, exmilitares del ejército de Sadam Husein y pequeños grupos terroristas.

El 29 de junio, el EI proclamó la creación de un “califato islámico” que se extiende desde Alepo, en el norte de Siria, hasta la provincia de Diyala, en el este de Irak.